La Fiscalía de Sevilla pidió ayer una multa de 900 euros para el ex ministro del Interior José Luis Corcuera, al que considera responsable de una falta contra el orden público por el incidente que protagonizó la pasada Feria de Abril con dos policías locales que impidieron el paso a su vehículo oficial. 

Los dos policías locales que declararon en el juicio ratificaron que el ex ministro se mostró "bastante exaltado" cuando inicialmente se le impidió el acceso a la Feria por un lugar reservado sólo para vehículos oficiales y de servicio público, y aseguraron que permitieron el acceso del coche de Corcuera al final del altercado, cuando el escolta que el acompañaba -un policía nacional- entregó la documentación del coche y acreditó que se trataba del ex titular de Interior. 

Los dos agentes, ambos jóvenes, insistieron ante el juez que no reconocieron a la persona que se bajó el coche como el ex ministro del Interior y uno de los agentes aseguró que el tono que empleó Corcuera fue siempre "despectivo" y con una voz muy elevada. "Mi escolta y yo vamos para adentro", fue la frase que, según el agente, pronunció Corcuera. "Me dijo que no sabía con quién estaba hablando", aseguró el policía local, que añadió que cuando le replicó que le estaba hablando con educación y sin amenazas, el ex ministro respondió que él "si le estaba amenazando" y que llamase a quien le diera la gana. El agente precisó que Corcuera se dirigía "a voces de manera muy despectiva" y que llegó a decirle, cuando le pidieron la identificación, "¡Venga, venga, tomadme las huellas dactilares!". 

El ex ministro del Interior, por su parte, negó que en todo momento tuviera una actitud inadecuada con los policías locales y explicó que el día que ocurrieron los hechos, el pasado 6 de mayo, era la "quinta vez en tres días" que accedía a la Feria con su vehículo oficial y hasta ese momento no había tenido ningún problema. 

Corcuera, que no tenía la obligación de acudir a este juicio, reconoció que cuando el agente intentó desviar el coche por otra calle, se apeó del vehículo y se identificó correctamente. "Le dije: me llamo José Luis Corcuera, he sido ministro del Interior, éste es mi coche oficial y ése mi escolta", afirmó el ex ministro, que negó que profiriera ninguna amenaza. "Le dije: usted además sabe quién soy yo", apostilló Corcuera, que explicó asimismo que tiene la seguridad de que "lo que pasó fue porque [el policía] sabía quién era" en realidad. 

El ex ministro negó que intimidara al agente porque, según dijo, él "no era nadie en aquel momento", ya que no tenía ningún cargo público. En cualquier caso, Corcuera aseguró al juez que se sintió "maltratado por un actuación absolutamente arbitraria" de los policías locales. Corcuera insistió en que él se identificó correctamente y también acreditó su identidad su escolta, si bien este testigo no ha comparecido al juicio porque el ex ministro no ha querido molestar a esta persona. 

Al término el juicio, el fiscal pidió una multa de 900 euros para el ex ministro por una falta contra el orden público del artículo 634 del Código Penal, al estimar que la negativa a identificarse y los "modos" que empleó, como decir a los agentes "yo sí que te estoy amenazando", constituyen esa infracción porque los agentes estaban cumpliendo con sus funciones. 

El abogado de Corcuera, Pablo Martínez del Cerro, pidió la absolución del ex ministro porque a su juicio se produjo una "mera discusión" y los policiales locales "abusaron" de su autoridad, al tratarse de una retención "injustificada". 

En el derecho a última palabra, Corcuera añadió que una vez que su escolta le dijo a los policías quién era él se sintió "liberado" de tener que acreditar su identidad. "No conozco que al que va vigilado se le pida que se acredite". 

Al juicio asistieron el superintendente de la Policía Local Juan José García y varios miembros del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme-A) para mostrar su apoyo a los agentes en la vista oral.