El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Sevilla, Carlos Mahón, en funciones de guardia, acordó este domingo la puesta en libertad con cargos, de los 23 ultras detenidos por la pelea ocurrida en la madrugada del sábado antes del derbi entre el Sevilla y el Betis. A los 23 implicados se les ha impuesto la obligación de comparecer en el juzgado los días 3 y 17 de cada mes, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

Los 23 detenidos, que están imputados por delitos de lesiones y daños, se acogieron a su derecho constitucional a no declarar cuando fueron puestos a disposición judicial. La causa seguirá investigándose en el Juzgado de Instrucción número 2, que asume la instrucción por haberse encontrado de guardia.

Los hechos ocurrieron sobre la una de la madrugada del pasado sábado en una taberna irlandesa ubicada en la avenida concejal Alberto Jiménez Becerril –en la prolongación de Torneo-, en la que ambos grupos se enzarzaron en una reyerta que acabó con una persona herida con contusiones y lesiones leves tras recibir un fuerte golpe en la cabeza.

El único herido en la pelea fue trasladado al Hospital Virgen Macarena, mientras que la Policía detuvo a otros 23 hinchas, entre los que hay tres de nacionalidad sueca. Los agentes de ambos cuerpos intervinieron varias armas blancas, así como un serrucho, un hacha, palos y punzones. También decomisaron varias entradas para el partido que enfrentó a ambos equipos por la noche en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.