La catedrática de Historia e Instituciones Económicas de la UPO, Lina Gálvez, analizó ayer las luces y las sombras de la Ley de Igualdad: "No ha sido una década normal porque, al poco tiempo de aprobarse la ley, estalló la crisis. La ley recargaba la responsabilidad en la negociación colectiva y, merced a los cambios en la normativa laboral, esa negociación colectiva ha sido arrinconada".

Gálvez se muestra taxativa: "La ley no se cumple, porque ha habido una falta de compromiso político con la igualdad. Antes había gobiernos paritarios y eso caía como una cascada virtuosa sobre la sociedad. Eso se ha ido diluyendo. Aún así, hay un antes y un después de la ley. Existe una herencia positiva, porque ahora, si vemos una mesa de debate solo de hombres, nos llama la atención. Siempre salta alguien diciendo: ¿Es que no hay mujeres expertas en ese tema? Esa mayor concienciación ha llevado también a una cierta reacción patriarcal, en muchos casos en forma de comentarios machistas, como es el caso de forocoches.com. En cifras, el mercado laboral se ha deteriorado tanto para mujeres como para hombres. La brecha del paro se había acortado, pero ahora, con la recuperación económica, se está agrandando otra vez".

Por su parte, la profesora del Departamento de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla, Blanca Rodríguez, lamentó la falta de compromiso político por parte de las instituciones públicas en relación con la Ley de Igualdad de 2007 y destacó que su principal "carencia es que no la han aplicado", por lo que ha exigido que se implanten medidas inmediatas como la paridad en todos los organismos públicos y "que se promueva desde los poderes públicos una política de igualdad en los consejos de dirección de las empresas".Por último, la presidenta del Consejo Social de la UPO de Sevilla e histórica dirigente política socialista, Amparo Rubiales, aboga por "un pacto social contra el machismo" con vistas a conseguir la "igualdad efectiva", así como por que en la Constitución se defina a España como "un Estado paritario, social y democrático de derecho".

"Hay que decirle a la sociedad que el pacto tiene que ser un pacto social contra el machismo, lo que mata es el machismo. La concepción machista de la sociedad que hace que el hombre se crea que la mujer es un objeto de su propiedad", sentenció Rubiales.