Los vecinos de la Alameda de Hércules han organizado otro acto para protestar por los usos que el Consistorio está tolerando en esta plaza pública, que aún no cuenta con mobiliario urbano y que consideran que ha dejado de ser "el espacio público social y dinámico que fue siempre". La nueva protesta tendrá lugar el próximo domingo a partir de las doce de la mañana y consistirá en la ocupación de la plaza con las mesas de camilla que lleven los propios vecinos, como una forma de reivindicar la utilización de la plaza por todos los ciudadanos.

En la convocatoria enviada ayer, los organizadores consideran que la reurbanización de la Alameda ha convertido este espacio en "un centro comercial" y, por tanto, "es menos el espacio público social y dinámico que fue siempre", al tiempo que pregunta a los vecinos si añoran "el albero, los bancos y las plantas", que han desparecido con las obras, y si están "hartos de no poder sentarte a tomar el fresco en la Alameda sin tener que consumir".

El colectivo insta a los vecinos a llevar su "mesa de camilla, juegos, o lo que te dé la gana", para reivindicar la plaza y define la iniciativa como una "acción plural y participativa para sentirnos en nuestra plaza tan bien como en casa". La idea es similar a la que ya llevaron a cabo antes de Semana Santa, cuando colocaron por sus propios medios los bancos de la plaza.