Ángel Orellana, el falso cura que durante cinco años estuvo ejerciendo como sacerdote en la parroquia de Santa María de las Flores y San Eugenio de Pío XII, no sólo se limitó a desarrollar su falso ministerio en esta feligresía, en la que, además de oficiar misas, impartió diversos sacramentos como el bautismo, la comunión y el matrimonio; también predicó los cultos de algunas hermandades y cofradías de la ciudad y ejerció como capellán de la Hermandad de gloria de los Humeros.

El falso cura, a raíz de la fama de buen predicador que fue cosechando en la Santa María de las Flores, dio el salto para predicar en el centro de la ciudad, incluso para ocupar un puesto fijo, como el de capellán de la Hermandad de los Humeros, donde predicaba cada domingo la misa de las once de la mañana. En el boletín informativo de esta corporación son numerosas las referencias que aluden a Ángel Luis Orellana Rodas como su capellán, cargo que al menos ocupó durante el año 2009. El falso sacerdote también presidió la misa que se celebra ante el paso de la Virgen del Rosario en el convento de Santa Rosalía, en la calle Cardenal Spínola. Fruto de la vinculación entre los Humeros y la comunidad de religiosas de este convento, Orellana predicó los cultos en honor a la Virgen de la Dormición en el año 2008. En septiembre de 2011, Orellana presidió, también en Santa Rosalía, una función solemne en honor de la Virgen de las Tristezas de la Vera Cruz.

En octubre de 2010, el falso cura tuvo el honor de predicar en una de las iglesias más señeras e históricas de la ciudad: Santa María Magdalena. Allí, presidió el triduo anual que la Hermandad de Montserrat celebró en honor de la Virgen del Rosario.