En su larga (83 años) vida, Antonino Vázquez puede estar orgulloso de muchas cosas, y no es la menor haber tenido la suerte de haber "disfrutado mucho" en sus tres facetas de agricultor, ingeniero y colegial. Como agricultor, este natural de Huelva, aunque sevillano "de adopción", puesto que en Sevilla ha vivido casi seis décadas, ha aplicado en fincas "técnicas modernas que han servido de ejemplo a otros agricultores". Doctor ingeniero agrónomo por la Escuela Especial de Ingenieros Agrónomos de Madrid, ha dirigido numerosas obras de transformación en regadío en zonas de Sevilla, Cádiz y Huelva, siendo el último jefe provincial en Sevilla del instituto Nacional de Colonización y del Iryda, proyectando y dirigiendo la construcción de más de 500 sondeos para aguas subterráneas en el proyecto Guadalquivir-FAO y fue profesor en los Máster de Ingeniería de Regadíos en diez universidades de Brasil. Como colegial, fue uno de los fundadores del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Andalucía, ocupando todos sus cargos, hasta decano (1993-2000) y es Colegiado de honor del Colegio y del Consejo Superior de Colegios de Ingenieros Agrónomos y Comendador Ordinario y de Número de la Orden Civil del Mérito Agrícola. Hace pues, honor, sin duda, al ingeniero romano que da nombre al Premio Columela, que el colegio andaluz acaba de concederle.