El presidente de Puertos del Estado, José Llorca, auguró este jueves en una conferencia en Antares que el Puerto de Sevilla tiene un "enorme, esperanzador y rompedor futuro" si sigue mejorando sus conexiones viarias, ferroviarias y su acceso marítimo. De las viarias señaló el enlace con la SE-40 como obra "imprescindible" para impulsar la salida de mercancías por carretera y lanzó una queja directa contra el Ayuntamiento de Sevilla por haber autorizado el centro comercial de Palmas Altas sin tener en cuenta las alegaciones del Puerto.

Llorca pidió al Consistorio que reflexione sobre "la congestión" que puede causar en los accesos al Puerto el tráfico del centro comercial Palmas Altas, cuyas obras comenzaron hace semanas. "Difícilmente son compatibles los tráficos de acceso a una zona de ocio con los de la actividad industrial del Puerto. Es una decisión política valorar si se quiere una actividad industrial o de ocio", lamentó el titular de Puertos del Estado.

En la conferencia estaba Carmen Castreño, concejal delegada de Economía y Comercio. Pero no parece haber solución. El Ayuntamiento respondió este jueves que Palmas Altas tiene licencia y todos los informes favorables de la Demarcación de Carreteras del Gobierno central y de la Junta.

Respecto a la dura competencia con el Puerto de Huelva y a la polémica que se desató a cuenta del terminal logística de mercancías de Majarabique (en construcción en suelos de La Rinconada) que promueve Huelva y explotará la iniciativa privada, Llorca lamentó que Huelva no ha aceptado finalmente la fórmula de gestión conjunta (en UTE) de Majarabique con el Puerto de Sevilla, pero considera que a Sevilla no le hace falta Majarabique. "La competitividad del Puerto de Sevilla no pasa por Majarabique. No tiene que usar ninguna terminal intermedia", dijo en referencia a la terminal ferroviaria de contenedores que ya tiene el Puerto en el Muelle del Batán. Detrás de la negativa de Huelva opinó que hay "posiciones individuales no compartidas; pregunten a las administraciones que nombran a los presidentes de los puertos". Son las comunidades.

Llorca llamó la atención a Sevilla sobre la pérdida de tráfico de contenedores que registra el Puerto en el último semestre, ya que una parte de esos contenedores se están yendo a los puertos de Cádiz y a Huelva por los horarios nocturnos restringidos que tienen los trenes de mercancías mientras no se construya el enlace directo al Puerto, una obra que saldrá a concurso pronto, anunció. "Algunos trenes que venían aquí ya no vienen. Los que no pueden operar en un puerto buscan la operativa en otro", dijo y aconsejó a Sevilla bajar sus tasas portuarias para competir. El descenso ha sido del 23% de toneladas transportadas en el primer semestre de 2017 y del 26% en número de contenedores TEUS. El malestar de alguno de los presentes llegó cuando Llorca dijo que "el Puerto de Sevilla juega en una división diferente que los grandes puertos marítimos europeos. Está en condiciones diferentes de otros puertos marítimos al ser interior" con una vía navegable que es el estuario del Guadalquivir. Minutos después tuvo que aclarar: "el Puerto de Sevilla no es de primera o de segunda división, es diferente a los grandes marítimos".

Avisa de que Sevilla está perdiendo tráfico de contenedores que se va a Cádiz y Huelva

Llorca respalda absolutamente que se le reconozca su singularidad como Puerto marítimo de interior y cree que el ahorro de 600.000 euros al año que logrará con ese reconocimiento (bajará del 4% al 2% su aportación anual al fondo interportuario) lo podrá invertir en aliviar los costes del dragado de mantenimiento anual que elimina los sedimentos acumulados en la canal de navegación. A su juicio, la estrategia del Puerto de Sevilla debe ser alcanzar el líderazgo en procesos industriales y logísticos, y buscando una mejora total de su conectividad viaria (el enlace con la SE-40), ferroviaria (el acceso directo al Puerto del tren de mercancías) y de su accesibilidad marítima (ampliar el calado en determinados puntos y siguiendo los condicionantes ambientales). Sobre este punto dijo que el Puerto debe perseguir tener cada vez más calado para la entrada de buques, sin llegar a los 12 metros que necesitan los grandes puertos marítimos.

Del transporte ferroviario de mercancías cree que "ese potencial que tiene con el ferrocarril es clave para el Puerto de Sevilla". Y del dragado de profundización, que no se renuncia a esta obra pero sí debe replantearse.

Llorca es contrario a las fusiones y partidario de la competencia entre puertos ("compiten los agentes económicos de cada puerto") y que la legislación no admite que sea desleal. "El modelo que tenemos es adecuado para la competencia controlada en beneficio de la viabilidad económica y eso beneficia a los puertos de Sevilla, Cádiz, Motril y Almería".