La UTE adjudicataria de la rehabilitación del antiguo mercado de la Puerta de la Carne como gourmet y otros usos culturales gozará de tres años de carencia en el pago del canon una vez que el contrato sea firmado. A partir del cuarto año de adjudicación -de un total del 35- la UTE sólo tendrá que abonar 18.000 euros al Ayuntamiento por la explotación del edificio, mientras que la UTE adjudicataria del edificio de las Naves del Barranco, actualmente en obras para su rehabilitación como gourmet, tendrá que abonar un canon anual de 230.000 euros. Y serán 18.000 euros después de que la UTE ofertara un 20% al alza sobre el precio inicial reflejado en el pliego de condiciones (15.000).

El canon de la UTE de la Puerta de la Carne sí irá subiendo progresivamente, de tal forma que a partir del quinto año y hasta el decimoquinto irá creciendo de los 25.000 a algo más de 100.000 euros. A partir del año decimosexto hasta el decimonoveno el canon se actualizará de acuerdo con el IPC. El año vigésimo se fijará en 150.000 euros y a partir de ahí se actualizará según el IPC hasta el último año de la concesión. Unas cifras, en cualquier caso, muy inferiores a las del otro mercado gourmet en ciernes. Fuentes municipales defendieron la necesidad de establecer un canon a la baja, habida cuenta de que la inversión que necesitará la rehabilitación de la UTE es de cinco millones de euros, por lo que la oferta debía compensar el gasto inicial que se requiere para poner el edificio a punto. En el caso de las Naves del Barranco, la inversión es superior a los dos millones de euros.

La UTE adjudicataria del gourmet de la Puerta de la Carne está liderada por el empresario cordobés Jesús León, el comprador del paquete de acciones del Sevilla F.C. de José María del Nido . La empresa de León en esta UTE es Inversport 2010, domiciliada en Málaga. Las otras entidades que forman parte del proyecto son Lolejoit S.L., del conocido hostelero José María Egaña; Factoría de Ideas, Consultores Asociados S.L., con domicilio social en Madrid, e Iberoamericana de Expansión 12, S.L., de Francisco Javier Ocaña .

La junta de gobierno del Ayuntamiento formalizó el viernes la adjudicación de la concesión administrativa que tiene por objeto la gestión del servicio público de mercado a implantar oficialmente como Centro de Cultura, Ocio y Gastronomía en el edificio, un inmueble de alto valor histórico y artístico que lleva años sumido en un evidente estado de abandono.

La planta baja albergará un espacio para restaurantes, una zona de pequeños establecimientos con veladores, una serie de puestos con productos gourmet y un espacio central de carácter escénico. Alrededor de este último se dispondrán unas gradas para el público. Está previsto que esta estancia esté conformada por elementos modulares móviles que permitan recrear diferentes zonas en función de las necesidades. Los promotores de esta iniciativa han propuesto ceder el uso de este espacio escénico al Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla durante un tiempo equivalente al 20% del total que permanezca abierto al público este centro cada año. La planta primera dispondría de dos zonas para restaurantes, con acceso a las terrazas exteriores, y una sala de usos múltiples. Con esta configuración del espacio se pretende facilitar el desarrollo de actividades variadas, con el objetivo de convertirse en referente cultural, gastronómico y de ocio en Sevilla. En la propuesta ha primado también la total conexión del espacio interior con el exterior del edificio, mediante la remodelación de los accesos y la reurbanización de una nueva plaza pública, en la que se dispondrá una pérgola y un quiosco-bar.