El concejal de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla, Maximiliano Vílchez, ha señalado que el proceso negociador con la multinacional sueca IKEA para la implantación de un centro comercial en la capital hispalense se encuentra "muy cerca del final", con "flecos" por resolver que son meramente técnicos.

En rueda de prensa, Vílchez ha expuesto que "es un proyecto muy complejo", para el cual se están llevando a cabo reuniones periódicas, y que, aunque todo está bien encarrilado, "hasta que no esté firmado no puede asegurarse nada". En este sentido, tampoco ha sido capaz de precisar si el acuerdo entre ambas partes estará listo para antes de que termine el presente año 2011.

"IKEA es una multinacional, y como tal también tiene sus propios trámites", ha especificado el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, que asimismo ha incidido en el hecho de que el proyecto presentado por la compañía no presenta cambios sustanciales, sino adaptaciones a la fórmula cuya tramitación podría llevarse de manera más rápida, y sin tener que entrar en la modificación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), "que es más lento".

Recientemente, Vílchez ya explicó que la multinacional sueca no ha puesto una fecha tope, subrayando que IKEA tiene "claro" cual es su proyecto integral, por lo que no cuenta con "intención de cambio", como puede ser en el número de metros cuadrados, pero sí se muestra abierta a negociar en aspectos como las ubicaciones de los almacenes.

De este modo, insistió en que actualmente el proceso se encuentra en una fase "puramente técnica, sin negociaciones políticas", donde los arquitectos de IKEA realizan sus planteamientos, que son analizados por los técnicos de Urbanismo, que plantean unas nuevas propuestas o aclaraciones. "Se trata de un intercambio de pareceres", concluyó.