Reducción de horario. Esto es lo que ocurrirá a partir del día 16 en la biblioteca pública Infanta Elena, dependiente de la Junta de Andalucía, que hasta el próximo día 15 de septiembre permanecerá cerrada por las tardes. Sólo estará operativa de nueve a dos, como en los colegios en los que ya hay jornada reducida. Es la primera vez que este centro cerrará durante todo el verano por las tardes.

Desde la Delegación de Cultura de la Junta indicaron que es la única biblioteca pública andaluza que en estos últimos años no ha reducido su horario en verano, ya que en otras provincias andaluzas sí han cerrado. La biblioteca Infanta Elena lo hará este año como medida de ahorro o austeridad, según explicaron fuentes de la Consejería de Cultura, que especificaron que en verano la afluencia de usuarios se reduce notablemente por eso reducen el horario para optimizar los recursos. Ésta no será la norma general, dijeron. Este año, de momento, se hará así.

Disminuyen los préstamos de libros, pero puede que no lo haga el número de personas que acudan a estudiar, ya que poco antes de las nueve de la mañana de ayer había cola de estudiantes para coger sitio en la biblioteca; a las nueve y media estaba completamente llena, según pudo comprobar este periódico. El problema es que la reducción de horario se rige por los préstamos realizados, no por el número de estudiantes que van a estudiar. Desde Cultura dejaron ayer muy claro cuál es el criterio: es una biblioteca no una sala de estudios.

Son muchos los estudiantes que acuden a este centro a estudiar y más en plena época de exámenes como ésta. La noticia cayó como un jarro de agua fría sobre ellos. Muchos se quejaron ayer a las puertas de la biblioteca cuando se dieron cuenta del cartel informativo que hay a la entrada -en color amarillo para no pasar desapercibido- que avisa de que a partir del próximo jueves el centro permanecerá cerrado por las tardes y los sábados no abrirá.

"Ahora no sé dónde vamos a estudiar porque terminamos los exámenes a mediados de julio y lo empezamos a principios de septiembre", declaró Álvaro, un estudiante de Farmacia. No fue el único que se quejó. Otro grupo de estudiantes afirmó que allí se estudia bien y que pasan todo el día en esa biblioteca preparándose los exámenes. "Me parece fatal que ahora por las tardes nos priven de este derecho siendo una biblioteca púbica. Yo hasta el 12 de julio tengo exámenes y este lugar me coge cerca de casa. ¿Qué hago ahora?", se preguntó Ana.

Además, varios lectores se han puesto en contacto con este periódico para denunciar esta nueva normativa, que les parece un "atentado cultural contra todos". Algunos, incluso, añaden que la biblioteca cierra por "falta de presupuesto", ya que la "Junta no dispone de medios económicos para las sustituciones de personal y tampoco para sufragar los gastos de suministro del inmueble".