Sevilla

Al borde de la urgencia

  • Los socorristas son los encargados de velar por nuestra seguridad en las playas y piscinas durante las vacaciones

El trabajo de socorrista es uno de los más demandados del verano. Los jóvenes que quieren serlo deben tener un título oficial. Muchos son los centros que los expiden y tres los más demandados. Se consideran oficiales los títulos de la Cruz Roja, del Tafad, título de técnico superior en Animación de Actividades Físicas y Deportivas, y el título de la Federación Andaluza de Salvamento y Socorrismo.

A partir de los 16 años, los jóvenes pueden lograr la titulación, es una forma de ganar dinero a edad temprana. Según Javier Morales Montero, socorrista y monitor de natación, "hay chavales que se lo toman a la ligera, es un trabajo que debe gustarte, un descuido puede suponer la pérdida de una vida".

Tanto las piscinas municipales como las privadas suelen contratar a los socorristas y al servicio de mantenimiento en empresas especializadas. Albert Calabuch, gerente de Sport and Salvament, explica que buscan a los socorristas a través del INEM. "Todos los años faltaba gente para los puestos y las vacantes las cubrían los extranjeros. Sin embargo, este año apenas se han requerido extranjeros, se han cubierto todos los puestos con la demanda nacional".

La piscina del Centro Deportivo Mar de Plata gestiona los servicios de su piscina a través de la empresa Anima d2. Esta empresa, al tratarse de un centro deportivo, también requiere el título de monitor de natación además del de socorrista. El precio de los títulos de socorrismo ronda entre los 400 y 500 euros, aproximadamente. Todos los títulos tienen una parte práctica y otra teórica con sus correspondientes pruebas, ambas partes se tienen que aprobar para obtener el título. Javier Morales Montero, socorrista, explica que "son muy pocos los títulos que no necesitan reciclaje, pero es conveniente de todas formas renovarlo cada año para conocer las nuevas normativas".

Jorge Rodríguez Gómez, socorrista, ha trabajado tanto en piscinas privadas como municipales y tiene más de cuatro años de experiencia. "La mayor diferencia entre el público es: en los polideportivos suele ser infantil, mientras que en las privadas es familiar". El trato y la relación con la gente pueden hacer el oficio más llevadero, pero Javier confiesa que "es fastidioso trabajar para que otros disfruten".

Los socorristas cobran normalmente entre 4 y 7 euros la hora, y suelen trabajar unas 8 horas diarias. Una queja generalizada entre los socorristas es la ampliación de sus competencias, Javier comenta que "en algunas piscinas los socorristas son los chicos para todo, tienen que dedicarse a las tareas de mantenimiento e incluso utilizar productos químicos que pueden ser perjudiciales para la salud".

El trabajo de socorrista no está exento de situaciones peligrosas. Jorge afirma que "nunca ha tenido que rescatar a alguien, ni le ha pasado nada grave. Pero he atendido a muchas personas por picadura de abeja, empujones y caídas en el borde de la piscina".

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