Una cabalgata de mayor recorrido, con paso por la Macarena, pero con muchos menos caramelos. El Ateneo y el Ayuntamiento están de acuerdo en que no se pueden seguir desperdiciando alrededor de 20.000 kilos de golosinas que acaban cada año por los suelos. La reducción en este apartado será de un 30 por ciento. En cambio, el conocido como cortejo de la ilusión repartirá entre los niños más juguetes y cuentos. Esta medida se ha tomado después de comprobar los datos de Lipasam, que no ofrecen dudas sobre los kilos de caramelos que tienen que ser recogidos de la calles del itinerario la noche del 6 de enero.

La cabalgata de 2008 tendrá un recorrido de 10,5 kilómetros, un kilómetro y medio más que la de la última edición. Saldrá de las cocheras de Tussam del Porvenir y llegará hasta la Macarena como gran novedad. Estará en la calle de 16.45 a 21.45. Los responsables de los servicios que participan en su organización se reunieron ayer en la sede del Centro de Coordinación Operativa (Cecop) para precisar determinadas detalles logísticos, como la forma de conseguir que la salida del cortejo sea más ágil y cómo resolver posibles incidencias que puedan surgir.

La organización espera que las grandes masas de público se concentren en la Plaza Nueva y en el eje Resolana-Parlamento. El director de la cabalgata, Anselmo Valdés, agradeció especialmente la participación de las bandas de música en la cabalgata de 2008, algunas de las cuales han dejado de acudir a pueblos de la provincia para cumplir con el cortejo de la capital. Y para 2009 se trabaja ya en una novedad, pues habrá una carroza dedicada a los servicios públicos, destinada a los hijos de quienes trabajan en la organización. Hasta 500 personas velarán la tarde del 5 de enero para que todo discurra sin problemas. Y todo no acabará a la entrada del cortejo. El Cecop se encargará de repartir juguetes entre los niños del Vacie y otras zonas necesitadas de la ciudad como el Polígono Sur.

La próxima cabalgata tendrá un cortejo de 32 carrozas en las que irán 2.300 participantes. Abrirá camino, como es costumbre, el coche de la organización tras el que figurará el heraldo recogiendo las cartas de los niños y el cuerpo de caballos del Ateneo.