La Policía Local de Sevilla abortó ayer un caso de telebotellona al sorprender a un hombre que vendía bebidas alcohólicas a los jóvenes para que fueran consumidas en plena calle. El hombre conducía un coche cargado de botellas y refrescos que eran dispensadas a todo aquel que lo llamara por teléfono poco antes.

Los agentes sospechaban de la existencia de este negocio ilícito desde hace varias semanas, al detectar a numerosos jóvenes cargados con botellas sin que hubiera ningún establecimiento abierto en las inmediaciones. Casi siempre solía actuar por la zona de los Remedios y fue precisamente en este barrio -en concreto en la avenida de Alfredo Krauss, junto al Parque de los Príncipes- donde la Policía Local lo interceptó a la una menos diez de la madrugada de ayer.

En el momento de la intervención, el Renault Megane de color rojo que conducía el denunciado, que es vecino de Camas, llevaba 46 botellas de dos litros de Coca-Cola, dos latas de Coca-Cola, una botella de sifón de 1,5 litros y 36 botellas de ron (21 de la marca Cacique, 11 de Capitán Caribe, 3 de Hatabey y una de Negrita). Además, portaba otras siete botellas de whisky White Label y 160 vasos de tubo de plástico. Por todo ello se le ha abierto un expediente sancionador por la infracción del artículo 7.1 de la ley andaluza que prohíbe beber en la calle, conocida popularmente como ley antibotellón.

Este punto de la normativa prohíbe el "aprovisionamiento de bebidas para su consumo y su venta mediante encargo realizado por vía telefónica, mensajería, vía telemática o cualquier otro medio".

El hombre fue trasladado a las dependencias de la Policía Nacional para ser identificado, ya que no llevaba documentación en el momento en que fue sorprendido. El coche permanece depositado en las dependencias de la Policía Local en la isla de la Cartuja.

La noche anterior a esta intervención el Cecop había recibido 16 llamadas de ciudadanos por botellonas. La mayoría de ellas procedían de Triana, Nervión y Los Remedios, pero generalmente se trataba de pequeños grupos compuestos por menos de diez jóvenes, salvo en un caso en la avenida de Carrero Blanco en el que había unas 60 personas. De las 63 pruebas de alcoholemia realizadas por la Policía Local, 6 fueron positivas. A lo largo de toda la jornada se detectaron 496 infracciones de tráfico.

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