El temporal no abandona Sevilla ni con la llegada del nuevo año. Las fuertes precipitaciones regisradas durante la jornada de ayer provocaron el desbordamiento del arroyo Tamarguillo a la altura de la barriada Vistahermosa, donde las aguas anegaron tres viviendas cuyos residentes las habían desalojado hace dos semanas ante el riesgo de inundación. El efecto de las lluvias también repercutió en las comunicaciones, concretamente en la línea de tren que une Sevilla con Huelva, que se vio interrumpida por la mañana, y en seis carreteras de la provincia que estuvieron cortadas por inundación.

Las previsiones meteorológicas se cumplieron y la lluvia acompaña a la capital andaluza desde la tarde del domingo. Durante este tiempo la Agencia Estatal de Meteorología registró en el aeropuerto de San Pablo una media de 52 litros por metro cuadrado. Las principales incidencias se produjeron en las barriadas de Aeropuerto Viejo, Valdezorras y Vistahermosa, donde el aumento del caudal del Tamarguillo provocó su desbordamiento y la anegación de tres viviendas en la carretera hacia Brenes.

Los propietarios de estos chalés, construidos a escasos metros del canal por donde discurre el arroyo, llevan 15 días fuera de sus casas al decretarse la alerta roja por fuertes precipitaciones, según declaró ayer a este periódico el presidente de la asociación de vecinos de Valdezorras, Juan Beltrán, quien añade que durante las últimas semanas los agentes de la Policía Local y los técnicos del Cecop han vigilado "a diario" el caudal del Tamarguillo para intervenir en el caso de que las aguas lleguen al núcleo urbano de estas barriadas.

El temporal, además, provocó ayer la interrupción de la línea de tren entre Sevilla y Huelva, cuyos pasajeros tuvieron que ser transbordados por carretera. El corte se produjo a las 7:35 como consecuencia de la acumulación de agua y se mantuvo hasta el mediodía, cuando se restableció la línea. Seis carreteras también se vieron afectadas por las precipitaciones, en concreto, la A-8029 en Dos Hermanas; la SE-3410 en Gerena; la A-8080 en Torre de la Reina (Guillena); la A-378 en las localidades de Martín de la Jara y Osuna; y la SE-4104 que circunvala la ciudad de Sevilla.

En la capital, donde cayó una fuerte tormenta de granizos a las seis de la tarde, el Cecop mantuvo todo el día cerrados los parques y jardines. Una imagen que contrastaba con las calles del centro, repletas de público que hacían las últimas compras de Reyes pese a las inclemencias meteorológicas.

Las previsiones de la Aemet apuntan a que la inestabilidad continuará hoy, aunque la probabilidad de precipitaciones disminuirá conforme avance la jornada hasta un 70%, por lo que cabe la esperanza de que la Cabalgata de Reyes Magos se libre del agua. Para la jornada del día 6 se mantiene el riesgo de lluvia. A partir de entonces las temperaturas bajarán cuatro grados, una tónica que continuará el fin de semana, cuando el temporal remita hasta que el domingo entre un nuevo frente nuboso.