La Policía Local de Sevilla ha detenido a un joven de 20 años, que ya había sido arrestado otras 42 veces, por varios delitos de robo y por conducir ebrio y sin permiso un coche que había sustraído.

Según ha informado este sábado el Ayuntamiento de Sevilla, los hechos tuvieron lugar el pasado jueves cuando un vehículo colisionó contra un contenedor en la calle Albérchigo de Sevilla.

Una patrulla de la Policía Local llegó al lugar y observaron que el coche estaba subido al acerado y tenía daños importantes en el eje delantero, mientras el conductor, que presentaba signos de embriaguez, se estaba echando colonia para disimular el olor a alcohol.

El joven reconoció que, además de alcohol -sextuplicaba la tasa pemitida-, había tomado varias sustancias prohibidas como cocaína, éxtasis y trankimazin.

El detenido, que dado su estado alternaba momentos de tranquilidad con otros de gran agresividad, dijo a la Policía Local mientras inspeccionaban el interior del vehículo: "No os voy a mentir, en el hueco de la rueda de repuesto he metido todas las herramientas que uso para robar y en la mochila también llevo la ropa para robar".

Los agentes encontraron en el coche numerosas herramientas como una maza, punzones, palanquetas, alicates de corte o tijeras, así como tres pares de guantes, una gorra y ropa de distinto tipo, además de una decena de gafas, con sus etiquetas, cuyo precio rondaba los 1.500 euros.

En el lugar se personó una mujer que resultó ser la propietaria del vehículo y que todavía no había denunciado su robo, que tuvo lugar horas antes.

En la comisaría, el detenido reconoció que las gafas las había robado en una óptica ubicada en las inmediaciones del edificio Viapol.

Al joven le constaban otras 42 detenciones, 16 de ellas al estar reclamado por numerosos juzgados, y siete de ellas por robo.