Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sevilla a un hombre de 37 de edad que, tras hacerse pasar por inspector de riesgos laborales, realizaba inspecciones sorpresa en comercios con la intención de cobrar distintas cantidades económicas -normalmente entre 200 y 600 euros por inspección- por falsos servicios prestados. Para dar mayor credibilidad al engaño, el detenido se presentaba en los establecimientos muy bien vestido y con una placa de identificación en la que figuraba su fotografía, lo que provocaba que los comerciantes no sospecharan que estaban siendo víctimas de una estafa, según ha informado la Policía en un comunicado de prensa.

La investigación se inició el pasado mes de marzo, cuando los agentes recibieron las denuncias de dos comerciantes del centro de Sevilla en las que manifestaban haber sido víctimas de una estafa por parte de un hombre que se hacía pasar por inspector de riesgos laborales con intención de realizar una inspección de la que, según decía, tenía conocimiento el encargado de la tienda. La falsa inspección consistía en subsanar algunas deficiencias, tales como las salidas de emergencias, los extintores o botiquines, terminando la misma con la expedición de una factura por la inspección realizada que se tenía que abonar en el acto y en efectivo por importes de entre 200 y 600 euros.

El autor de estas estafas seleccionaba los comercios que carecían de cámaras de video vigilancia para evitar ser identificado y dificultar así el trabajo policial. Una de las vías de investigación se centró en el modus operandi, llevando a los investigadores hasta una persona que había sido detenida en varias ocasiones en las Islas Canarias por cometer delitos de la misma naturaleza y hacerse pasar por inspector de riesgos laborales. 

Haciendo un seguimiento a este hombre, los agentes tuvieron conocimiento de su ingreso en prisión preventiva en el centro penitenciario de Sevilla por un delito de violencia de género, lo que le situaba ya físicamente en Sevilla, ciudad donde se habían producido los hechos. Así, los investigadores comprobaron que esta persona se había desplazado hacía varias semanas hasta Sevilla, donde se encontraba residiendo de forma eventual y se hacía pasar por inspector de riesgos laborales.

De esta forma, se puso en marcha un dispositivo policial para proceder a la detención de esta persona por su participación en un delito de intrusismo y estafa, tras lo cual fue puesto a disposición de la autoridad judicial.

La investigación se ha llevado a cabo por el Grupo Operativo de Investigación de la Comisaría de distrito de Centro. La Inspección de Trabajo y Seguridad Social es la encargada de las normas legales y acuerdos en el marco de Prevención de Riesgos Laborales, que es llevada a cabo por funcionarios de carrera, levantando siempre acta de cada inspección realizada, no llevándose a cabo ningún cargo por dicha visita y menos en efectivo.

Por ello, se recuerda a los ciudadanos y en especial a los comerciantes la necesidad de denunciar si existen sospechas de actuaciones irregulares.