Médicos sevillanos · David Farrington

"Me emperré en acabar con la cultura de derivar pacientes a Madrid o Barcelona"

  • Durante los diez años que atesora como jefe en el área de Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil en el Virgen del Rocío ha incorporado técnicas novedosas, que colocan al hospital sevillano entre los centros en primer nivel internacional.

Aterrizó en el Virgen del Rocío hace diez años como jefe de la Sección de Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil con el afán de colocar al Hospital Infantil entre los centros de referencia a nivel nacional para procesos quirúrgicos muy complejos. Y lo logró. En 2010 el Ministerio de Sanidad acreditó a su unidad y desde entonces su equipo se encuentra en la primera línea de la especialidad. Natural de Sevilla y de padre americano, pasó gran parte de su infancia en EEUU. Estudió Medicina en Sevilla y realizó la especialidad en el Valme. En su tercer año de residencia realizó una estancia formativa en EEUU, en la Clínica Mayo, donde quedó deslumbrado por el doctor Peterson, una figura internacional en el campo de la Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil. Desde entonces se siente un privilegiado por poder dedicarse a esta área de la Medicina.

-¿Cuáles eran sus prioridades cuando cogió las riendas de la unidad en el Virgen del Rocío?

-La Cirugía Ortopédica Infantil en España siempre había tenido un cierto peso en Madrid y en Barcelona. Me propuse intentar conseguir que el Virgen del Rocío estuviera entre los grandes. Y en el año 2010 conseguimos que el Ministerio de Sanidad acreditara a la unidad como centro de referencia nacional, lo que es un privilegio y un verdadero lujo.

-¿Cuáles son los procesos más frecuentes en su área?

-El caballo de batalla de la Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil son las fracturas en los niños. Son el día a día. Dentro de nuestra unidad también hay una serie de patologías muy comunes: las deformidades en los pies, el pie plano, pie zambo, deformidades en la rodilla, como piernas zambas o piernas en X. Otras deformidades son más complejas. Uno de los grandes pilares de la unidad es la neuroortopedia.

-¿Por ejemplo?

-Son pacientes delicados que tienen un alto riesgo anestésico y quirúrgico, y ahí sí somos probablemente uno de los hospitales de referencia en España, en neuroortopedia. Hay seis centros de referencia nacional en España y nuestra unidad es la única que está acreditada en Andalucía.

-¿Qué área le ha ocupado más?

-La patología de la columna pediátrica. Tenemos una experiencia bastante dilatada y probablemente somos el hospital de España que más pacientes de patología pediátrica de la columna atiende.

-En 2014 su equipo fue pionero en una técnica para tratar escoliosis infantil. ¿Cómo evoluciona Fabiana, la niña que se sometió por primera vez a esta técnica?

-Muy bien. Con el programa de tratamiento de la escoliosis en niños de menos de diez años hemos conseguido colocarnos en primera línea a nivel mundial, lo que se reflejó en la noticia hace dos años de la intervención de Fabiana, que tenía una escoliosis de 45-50 grados. Dos años después tiene escasamente 15 grados.

-¿Cuántos casos han intervenido más con la técnica del tirante?

-Cinco. La sensación es muy buena. En EEUU llevan ya en torno a 100 y 120 casos, y parece que es la opción que gana más peso.

-¿Puede describir la técnica?

-La técnica convencional fusiona todas las vértebras en las que está la deformidad, de modo que la columna pierde movimiento y potencial de crecimiento, mientras que con la nueva técnica (basada en un tirante) se preserva el movimiento y la deformidad. Es menos agresiva, el paciente puede seguir creciendo con normalidad y se puede mover. No existe el tratamiento perfecto para tratar una enfermedad y siempre se paga un precio. Lo ideal es que el precio que se pague sea el mínimo.

-Los niños son especiales.

-Nunca saco a un niño de mi consulta para explicar algo a los padres, nunca. Muchas veces pensamos que los niños no tienen capacidad de entender, y la mayoría de los niños sí son capaces de entender si se les explica de una manera correcta y adecuada a su edad.

-¿Cuántos niños pasan por su unidad al año?

-Unas 9.000 consultas al año y unas 450 operaciones. Somos seis traumatólogos infantiles en la unidad. Uno de los mejores equipos a nivel nacional. Los niños están en buenas manos.

-¿Suben las fracturas en verano?

-Hay una época en que se dispara el número de fracturas y en particular en Andalucía, con el calor, en cuanto llega abril y mayo, los niños están en la calle todo el día, y es raro el día en que no hay que tratar una fractura.

-¿Cuáles son los casos más delicados?

-Vemos al año en torno 300 y 400 pacientes de todo el país y se operan todos los años unos 70. Son principalmente niños con parálisis cerebral con deformidades en las piernas, que les dificulta hacer una vida lo más normal posible. Se someten a muchísima cirugía a lo largo de la infancia. Lo que se pretende es que al niño le cueste lo menos posible caminar. Que le resulte más llevadera la deformidad. Otra área importante son los niños con escoliosis congénita: casos muy severos que desarrollan deformidades en la columna a edades muy tempranas. En estos casos somos pioneros al introducir los tallos de crecimiento electromagnéticos, que reducen el número de cirugías a las que tienen que someterse estos niños.

-Se preocupa por incorporar lo último para sus pacientes.

-Cuando comencé aquí había una cuestión que me molestaba muchísimo: existía la cultura de que el paciente tenía que irse a Madrid o a Barcelona para recibir un tratamiento lo más actualizado posible. Me emperré en que no fuera así y ahora mismo el nivel de la Cirugía Ortopédica y Traumatología Infantil en el Virgen del Rocío está en el primer nivel internacional.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios