Catorce personas han muerto y otras 49 han resultado heridas en los más de 150 incendios que se han registrado en Sevilla y provincia en los últimos tres meses. La época de frío suele coincidir con un repunte de los fuegos en viviendas, si bien este invierno está siendo especialmente trágico. No hay más casos que otros años, pero sí más víctimas mortales. De los catorce muertos, tres han sido en la capital, contando a los dos de ayer en Nervión, y los once restantes en la provincia. Casi todos los siniestros tuvieron un origen de tipo eléctrico y en muchas ocasiones fueron ocasionados por radiadores, calentadores y braseros.

El rosario de muertes se inició el 10 de noviembre de 2014, cuando un anciano de 84 años perdió la vida en el incendio de su casa en Montellano. Tres días después se produjo el incendio que se ha cobrado un mayor número de víctimas mortales en los últimos años. Cuatro miembros de la misma familia murieron al arder su casa de Arahal. Tres de ellos, el matrimonio formado por Rafael de Bal, de 70 años, y Ana López, de 72, y su nieto de 11, Rafael, fallecieron en el acto. Otro nieto de 18, Manuel, murió en el hospital al día siguiente. Este incendio estuvo originado por un ordenador portátil que se estaba cargando sobre un sofá del salón de la casa. Ese mismo día murió un hombre de 86 años en su casa de Alcalá. Estaba fumando un cigarrillo en la cama y se quedó dormido.

La séptima víctima fue la primera que falleció en Sevilla capital, Carmen Molina, una mujer de 77 años que murió en su casa del Cerro del Águila el 11 de diciembre. Un día después, moría el escritor Rafael de Cózar al intentar salvar de las llamas su biblioteca, en su casa de Bormujos. Fue el último incendio con víctimas mortales de 2014, si bien a finales de año hubo varios siniestros con heridos. Tras una primera semana de 2015 tranquila, el 8 fue la jornada más ajetreada del invierno para los Bomberos. Ese día se registraron cuatro incendios en viviendas. El más grave de ellos ocurrió en Lora del Río, donde una mujer de 25 años, Josefa Barrera Jarril, y sus hijos mellizos de 2 años, Daniel y Alejandra, perdieron la vida al arder su piso. La Guardia Civil cerró recientemente el informe sobre este incendio y concluyó que se había originado en un brasero, en el que se declararon las llamas que luego se extendieron por la mesa camilla. Ese mismo día, dos personas resultaron heridas en Estepa, otras cinco, entre ellas tres menores, en Écija, y dos más en Alcalá de Guadaíra. La décimo segunda víctima mortal de este invierno fue una mujer de Dos Hermanas que presuntamente prendió fuego a su vivienda, el 31 de enero. Las dos personas que ayer murieron en Nervión completan esta negra lista. Los Bomberos recomiendan encarecidamente que no se dejen braseros, radiadores, calefactores encendidos durante la noche. Tampoco se deben dejar cargando aparatos ni sobrecargarse las regletas. Es muy aconsejable instalar detectores de humo.