Un local pequeño ubicado en el eje comercial de mayor cotización de la ciudad (Avenida de la Constitución, Tetuán, Velázquez, O'Donnell) es la gran perla que busca cualquier agente de la propiedad inmobiliaria para cerrar una gran operación. En los años de boyantía económica se han llegado a cerrar contratos de compraventa de cien millones de las antiguas pesetas por un local de 30 metros cuadrados en esta ubicación privilegiada. En el mercado de los alquileres de locales comerciales, la clave siempre es la planta baja, por lo que en no pocas ocasiones las plantas superiores son un problema para cerrar operaciones de nuevos contratos de alquiler.

Los expertos advierten que una consecuencia del exceso de locales vacíos, tal como ocurre ahora mismo en la ciudad, es la desaparición de la figura del traspaso. Ya no se cierran prácticamente traspasos, salvo contadas excepciones de negocios con licencia de actividad y de veladores en zonas acústicamente saturadas (ZAS) donde no hay opción administrativa de conseguir nuevos permisos, caso por ejemplo del barrio del Arenal. Pero son casos muy contados.