A pesar de la oposición de los colegios de Aparejadores y Administradores de Fincas y de la reciente propuesta del PSOE para su retirada, la Gerencia de Urbanismo ratificó este miércoles a este periódico que mantiene su plan de cobrar a partir de enero de 2013 una nueva tasa de 100 euros como mínimo y 3.000 euros como máximo a los vecinos que presenten la Inspección Técnica de Edificios (ITE). La tasa se cobrará por el trámite administrativo que realiza el personal municipal de la Gerencia de Urbanismo al registrar y archivar el informe de la inspección de cada edificio. Esta tasa, que se ha creado a raíz del plan de ajuste del Ayuntamiento 2013-2022 derivado del plan de pago a proveedores, supone unos ingresos para el Consistorio de 200.000 euros al año.

Los colegios de aparejadores y administradores de fincas se oponen al cobro de esta tasa por considerar que se penaliza a los vecinos que cumplen con la inspección de edificios, mientras los que incumplen esta obligación no llegan a sufrir medidas sancionadoras. Los aparejadores critican que las sanciones a los infractores nunca se aplican.

La tasa en cuestión se trata de una cuota de 0,55 euros por metro cuadrado de superficie construida catastral con unos máximos correctores de 200 euros para edificios de hasta 500 metros cuadrados, 350 euros para edificios de hasta 1.000 metros cuadrados, 1.000 euros para edificios de hasta 5.000 metros cuadrados y 3.000 euros para edificios superiores a 5.000 metros cuadrados.

Desde la oposición, el portavoz del PSOE, Juan Españas, lamentó el martes que el gobierno de Zoido parece haber visto "un filón" en la ITE al aprobar una nueva tasa para el trámite administrativo que supone la presentación del informe en Urbanismo que hasta ahora no conllevaba coste alguno al propietario. Espadas recordó que esa tasa mínima de 100 euros tendrá que sumarse a los gastos de la inspección técnica y de las obras que tengan que soportar los particulares.