La implantación del sentido único en la ronda histórica se hará por tramos y comenzará el próximo mes de agosto con el espacio comprendido entre la glorieta de la Barqueta y el cruce de la avenida de Miraflores. Así lo avanzó ayer el concejal de Movilidad, Francisco Fernández, al término del encuentro que mantuvo con técnicos de las diferentes delegaciones y empresas municipales afectadas por la reordenación del tráfico en la ronda.

A principios de agosto comenzarán una serie de pequeñas obras y cambios en la señalización vial para que el tramo entre la Barqueta y la avenida de Miraflores esté orientado en sentido único a finales de ese mes. Todos los coches particulares circularán obligatoriamente desde la Barqueta hacia el Prado, mientras que se habilitará un carril reservado para autobuses y taxis en el sentido de la marcha y otro en el contrario.

Los conductores que vengan desde el Prado y Menéndez y Pelayo podrán acceder por la ronda justo hasta el cruce con la avenida de Miraflores. Ahí tendrán que girar obligatoriamente a la derecha y los que quieran continuar hacia la Barqueta deberán subir por esta vía para conectar con la ronda de Pío XII y poder así seguir la marcha hacia el Hospital Macarena y la avenida Concejal Alberto Jiménez Becerril para girar a la izquierda y llegar de nuevo a la glorieta Cayetana de Alba. Otra opción es salirse antes de la ronda por la Carretera de Carmona, que es más ancha que la avenida de Miraflores y además tiene doble sentido.

En principio ninguna de estas calles sufrirá cambios importantes en cuanto al sentido de la marcha, si bien el Ayuntamiento ya anunció en su día que la intención final a largo plazo es que todas las grandes avenidas de la ciudad sean de sentido único. Sí habrá pequeñas modificaciones en las calles que desembocan en la ronda, ya que se prohibirán los giros a la derecha hacia la dirección que quedará prohibida.

La ronda histórica tiene una longitud de aproximadamente cuatro kilómetros y el tramo entre la Barqueta y Miraflores es de 1,5. El segundo trayecto que la delegación de Movilidad quiere remodelar es el comprendido entre el cruce de la avenida de Miraflores y la Florida. El concejal responsable de este departamento no quiso precisar fechas para esta segunda fase del plan de sentido único de la ronda, pero sí aseguró que se hará "sin solución de continuidad" tras la experiencia del primer tramo. La última etapa del plan es la implantación del sentido único entre la Florida y el Prado de San Sebastián, concretamente la glorieta del Cid.

A la reunión de ayer asistieron técnicos de Movilidad, Urbanismo, Tussam, Lipasam, Emasesa, Policía Local y del distrito Macarena. El proyecto estará cerrado para finales de julio y en esa época está previsto que el edil de Movilidad se reúna con los colectivos afectados por esta iniciativa, como pueden ser los vecinos, comerciantes y taxistas. Según el Ayuntamiento, se ha elegido agosto para poner en marcha el proyecto porque el volumen de tráfico es mucho menor al de otros meses.