La Asociación Profesional de Guías Turísticos de Sevilla (APIT Sevilla) ha registrado una disminución del 4% en el sector este año con respecto al anterior. Para evitar una mayor caída en las visitas, los guías turísticos solicitaron ayer al Consorcio Turismo de Sevilla el diseño de nuevos "incentivos" para la ciudad.

El vicepresidente de APIT Sevilla, Antonio Doblas, aseguró que "se está notando bastante" la bajada en comparación con otros años, sobre todo en el número de entradas al Real Alcázar y a la Catedral, los monumentos más visitados. Doblas consideró que esta situación responde, "además de a la crisis generaliza", al hecho de que, a su juicio, "Sevilla necesita incentivos para atraer al turismo, porque hoy en día el visitante exige algo más", a lo que agregó que "la promoción está muy bien, pero hay que acompañarla". En este sentido, el portavoz del sector apuntó a que, por ejemplo, "Sevilla tiene dedicadas 117 óperas y mucha gente pregunta por ellas", por lo que apostó por la creación de "teatros especializados en óperas como tienen otras ciudades".

Doblas señaló las deficiencias de la actividad nocturna sevillana, que "para el turista es muy pobre, porque quitando lo flamenco no tiene mucho más que hacer, no hay nuevas cosas". Ante tal situación, el vicepresidente de APIT Sevilla anunció que la entidad ha elevado una serie de propuestas a Turismo de Sevilla y avanzó que "el próximo verano se pondrá en marcha un programa para la atracción de turistas".

Doblas también propuso la creación de un eje peatonal Catedral-Macarena, que pasaría por la peatonalización de calles como San Luis, porque "no se puede pasear con un grupo de 30 personas por una calle así, con aceras tan estrechas".