Al menos sesenta hombres fuertemente armados irrumpieron hoy en un rancho propiedad del presidente de la Unión Ganadera Regional del Estado de Guerrero (UGREG), en el sur de México, asesinaron a diez personas y secuestraron a una hija del representante ganadero.

Los hechos tuvieron lugar en Petatlán, una población del sureño estado de Guerrero cercana al balneario turístico de Zijuatanejo, informaron las autoridades locales.

En la acción murieron dos hijos del presidente de la UGREG, Rogaciano Alva, y ocho de sus empleados, dijo a Efe el director de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Erit Montúfar.

Alva sobrevivió ayer en la ciudad de Iguala, en el norte de Guerrero, a un ataque de pistoleros que dejó siete muertos y ocho heridos en un hotel, la mayoría miembros de su organización ganadera.

Los sicarios llegaron esta madrugada al rancho de Alva vestidos con uniformes de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) y armados con rifles AK-47 y R-15.

Fuentes oficiales de la procuraduría (fiscalía) señalaron que el grupo de sicarios secuestró además a Ana Karen Alva de la Cruz, de 18 años e hija del ganadero.

Hasta el momento se desconoce el móvil de los atentados, pero no se descarta la participación del crimen organizado.

Rogaciano Alva, ex alcalde de Petatlán entre 1996 y 1999, es acusado por algunas organizaciones sociales de ser uno de los autores intelectuales del asesinato, en octubre de 2001, de la abogada mexicana y activista de derechos humanos Digna Ochoa, supuesto por el que nunca ha sido acusado por las autoridades.

Hace cerca de un año Alva también sobrevivió a un atentado, cuando un grupo de desconocidos disparó contra la camioneta en que viajaba.

El diario mexicano la Jornada recordó hoy que un informe de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos vincula a Alva con la desaparición y asesinato de líderes ecologistas en el estado de Guerrero.