La Audiencia Provincial de Madrid confirmó ayer el archivo del caso de las presuntas sedaciones irregulares que se llevaban a cabo en el servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés, práctica a la que en algunos círculos se llegó a atribuir hasta 400 muertes. Esta sentencia, contra la que no cabe recurso, ordena retirar además del auto judicial anterior (dictado en junio) "toda referencia" a la existencia de una "mala práctica médica" por parte del responsable de Urgencias de ese hospital, Luis Montes, cesado por la Consejería de Sanidad a raíz del caso por pérdida de confianza. En rueda de prensa, Montes solicitó que el Ejecutivo madrileño "pida perdón a los usuarios" al tiempo que anunció medidas legales.

El Juzgado de Instrucción número 7 de Leganés dictó, el pasado mes de junio, auto de sobreseimiento del caso en una resolución que consideraba que se produjo mala praxis médica en la administración de sedantes a pacientes terminales, pero que no se podía acreditar la conexión entre ésta y las muertes que se produjeron en el centro. La confirmación de ayer implica que se archivará el caso.

"Es un fallo firme contra el que no cabe recurso", aseguró el doctor Montes. El médico, que compareció, en una rueda de prensa, acompañado de otros facultativos aseguró que ahora empieza "el tiempo de la reparación" y exigió que, "al igual que se hizo una campaña de acoso pagada por la Consejería de Sanidad", haya otra dirigida a "rehabilitar" el buen nombre de los facultativos perjudicados por este caso y también del hospital. Montes auguró que, tras el auto de ayer, habrá "denuncias y querellas individuales y colectivas" por las acusaciones de mala praxis que pesaron sobre él y otros médicos.