La circulación en las carreteras se ha complicado pasado el mediodía, en el inicio de la segunda fase de la operación salida de Semana Santa, aunque los mayores problemas se han registrado a causa de dos accidentes en la A-2 y la A-3, en Zaragoza y en Cuenca, que se están solventando.

Según los datos de la Dirección General de Tráfico el accidente ocurrido en la autovía A-2 en Zaragoza, está provocando retenciones de 14 kilómetros en sentido Barcelona, y 11 en dirección a Madrid, por lo que la circulación se está desviando por una vía de servicio.

En Cuenca, en la localidad de Cervera del Llano, otro siniestro ha ocasionado retenciones en la A-3, donde la circulación ha ido recuperando la normalidad a lo largo de la mañana.

La situación en las salidas de Madrid también empieza a complicarse con retenciones de casi siete kilómetros en la A-6 (carretera de la Coruña), y otros cuatro en la A-5 (carretera de Extremadura) a la altura de Navalcarnero; los mismos que hay en la A-3 (carretera de Valencia) a la altura de la localidad de Rivas Vaciamadrid.

También en Burgos, en la AP-1, hay 11 kilómetros de retención a la altura de la localidad de Crisaleñas y otros 8 en Cardeña Jimeno.

Las retenciones alcanzan también los 8 kilómetros en la C-629 a la altura de la localidad de Villasana de Mena hacía Burgos y en La Puebla de Arganzón, en la A-1, hay otros siete kilómetros de atasco en sentido Madrid.

Otras vías que presentan problemas son la A-7, en Murcia, con seis kilómetros de retención, en dirección Almeria, y otros cuatro en la localidad de Santomera en el mismo sentido.

En Pontevedra, en la AP-9, hay cuatro kilómetros en Tui, y en Cantabria la congestión supera los seis kilómetros y medio en la localidad de Camargo -en sentido Santander- y otros cuatro en la A-8, a la altura de Heras.