La Policía nipona está investigando a un hombre que supuestamente ha mantenido a su hijo, que padece una enfermedad mental, enjaulado durante más de 20 años, según informó ayer la agencia Kyodo.

Aparentemente, el hombre, de unos 70 años, confesó que ha mantenido a su hijo, mayor de 40, en una jaula de madera desde que tenía 16 alegando que tenía un comportamiento violento, según fuentes de la investigación. La jaula se encontraba en un prefabricado junto a la vivienda del hombre en la localidad de Sanda (oeste).

La Policía, que comprobó que el hijo se encuentra en buen estado de salud pese al pequeño tamaño de la jaula (1 metro de altura y de 0,9 por 1,8 metros), espera acusar al hombre de confinamiento ilegal.

Al parecer el hombre reveló que mantenía encerrado a su hijo y que le permitía bañarse cada varios días a un funcionario del Ayuntamiento de Sanda que visitó su casa en enero.

En diciembre, la Policía detuvo a una pareja de Osaka (oeste) tras descubrir el cuerpo de su hija fallecida, de 33 años, a la que mantuvieron 15 años encerrada en un cuarto diminuto.