TV-Comunicación

Cuenta atrás para la compra de La Sexta por parte de Antena 3

  • La cadena del Grupo Planeta adquirirá por 200 millones la empresa de GAMP y Televisa y abarcaría una cuarta parte de la audiencia y un 42% del mercado.

Esta es la metáfora que  se presentaba cuando surgía el asunto de la  fusión de Antena 3 con La Sexta, negociaciones que arrancaron hace dos años: "esto es una operación de cirugía. Si te implantan una mano, los nervios, los huesos y los músculos, han de unirse para que la mano sea útil, y no un muñón". Parece que el injerto ha fructificado, es un tejido sano y la mano se mueve sin perjudicar al resto del cuerpo. 

En los próximos días, "en cualquier momento", Antena 3 va a anunciar la compra de La Sexta y su grupo de canales, incluido el de pago Gol TV, en una operación que rondaría los 200 millones de euros, menos del 10% del valor del comprador, más otros acuerdos colaterales. El precio se atiene al lastre de las deudas que tenía la joven cadena, sobre todo por los derechos deportivos. Un precio que es la quinta parte de lo que abonó Telecinco por Cuatro; por parte de los múltiplex de Prisa y la integración en el accionariado de  Canal + con un 18%, una operación que supuso 1.000 millones de euros. Antena 3 se equipara a Telecinco con una compra más ventajosa. A partir de ahora se formaría un duopolio en el mercado televisivo español, a semejanza de lo que sucede en la mayoría de los países europeos. Mediaset controla el 43% del mercado publicitario y la nueva Antena 3, el 42%.  A fecha de ayer, el grupo de canales de Mediaset  acumulaba en diciembre una cuota del 24,6%, frente al 26,1% de los de A3-La Sexta. 

 

La cadena que consiguió la licencia analógica en el primer año de gobierno de Rodríguez Zapatero está constituida en un 51% por el Grupo Audiovisual de Medios de Producción (GAMP), formado por Globomedia y Mediapro (acuciada por las deudas por los derechos de explotación de la Liga) y con accionistas menores como El Terrat (Andreu Buenafuente), Bainet (Karlos Arguiñano) y Drive;  y un 40% por la poderosa empresa mexicana Televisa.

 

La Sexta anunciaba ayer la marcha de su director de antena, Fernando Jerez (que hace un año salió de Cuatro ante la compra de Telecinco), una noticia interna que dio la voz de alarma antes de esta compra que podría anunciarse hoy, cuando podría rubricarse el acuerdo. Antena 3, que cotiza en Bolsa, debe comunicar a la Comisión del Mercado de Valores la operación. La Sexta, que comenzó a emitir en la primavera de 2006, finalmente no llegó a acceder al mercado bursátil pese a poner posibles fechas. Ambas partes han negociado en Barcelona en estos días los términos de la compra en la sede del Grupo Planeta.  La Sexta se asegura mantener su marca, línea editorial, una plantilla que no rebasa los 80 trabajadores y sus directivos. La cúpula de La Sexta pasa a depender del presidente de Planeta y Antena 3, José Manuel Lara, y del consejero delegado del grupo audiovisual, Silvio González. 

 

La operación, eso sí, tendría que pasar el dictamen del Ministerio de Industrial y de la Comisión Nacional de la Competencia, por lo que hasta el verano no se produciría el mandato definitivo. Los directivos de La Sexta mantendrían la línea del grupo de canales, aunque sin la presión económica en que se han encontrado por las deudas durante este año. 

 

De las dos fusiones surgidas tras el apagón analógico y una crisis acuciante quedan dos grandes grupos de canales en la TDT española, frente a una TVE sin publicidad, unas autonómicas en proceso de revisión de costes y un puñado de canales en solitario que ninguno alcanza el 2% de la audiencia.

 

"Posible - aconsejable - necesaria". Esos tres escalones anuales, señalados por el director general de La Sexta, José Miguel Contreras, fueron marcando el acercamiento con Antena 3, con una devaluación agravada por las deudas deportivas y el descenso de audiencia de estos años. Planeta exigía libertad para actuar de forma inmediata en la gestión del grupo comprado. El tiempo ha jugado a favor de los intereses de la editorial, quien entró en Antena 3 a raíz del desastre de gestión de Telefónica,  quien actuaba entonces a favor de los intereses del presidente Aznar. El presidente Zapatero se marcha viendo cómo la cadena surgida a su amparo queda absorbida por esa misma Antena 3.

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