Megan Montaner regresa este martes a la parrilla de Antena 3 como protagonista de Sin identidad, una ficción de Diagonal TV en la que da vida a María Fuentes, una joven abogada que pertenece a la clase alta madrileña y cuya vida se queda vacía cuando descubre por casualidad que fue adoptada ilegalmente. En compañía de un compañero de profesión (Daniel Grao) y de un friki de la informática (Eloy Azorín), María deja atrás la cómoda vida que le rodea para encontrar su verdadera identidad y pronto se dará cuenta de que su historia no tiene nada que ver con el lujo que le ha rodeado desde pequeña y que su verdadera familia no está formada por un magistrado del Tribunal Supremo (Jordi Rebellón) y su esposa (Lydia Bosh) sino por una exprostituta analfabeta (Victoria Abril) y la hija de ésta (Verónica Sánchez). Aprovechando su profesión, María quiere ahondar en la verdad de los casos de niños robados que se sucedieron en España hace algunas décadas pero, sin saber cómo, acaba capturada por una trama internacional de trata de personas y condenada a cadena perpétua en una cárcel asiática, de la que consigue escapar a los diez años. Será entonces cuando empiece la verdadera historia, ya que regresa a España para clamar venganza a los que durante años consideró como su familia.

Sin identidad narra en nueve episodios una complicada historia basada en la traición y en la venganza. Desde Antena 3 dan una vuelca de tuerca a la historia y aseguran que se trata de una versión contemporánea del clásico de Alejandro Dumas, El conde de Montecristo.

"Le hemos dado muchas vueltas a los guiones de esta ficción hasta estar contentos con el resultado de una historia de niños robados, de venganza y de traición", explicó en la presentación de la serie su productor ejecutivo, Jaume Banacolocha. Aunque Jordi Rebellón matizó de forma tajante que "no es una serie de bebés robados".

La historia, en cualquier caso, llega esta noche al prime time de Antena 3 para intentar ocupar el sitio que ha dejado en Telecinco la serie El príncipe y, en principio, no tendrá que enfrentarse a ninguna ficción nacional, ya que Mediaset ha decicido luchar por la audiencia de los martes con la nueva edición de Mira quién salta, que deja la noche del jueves tras los flojos datos cosechados la pasada semana en su estreno.