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Morante anuncia que se retira

  • El diestro de La Puebla, a los 37 años y en su vigésima temporada como matador de toros, declara al término del mano a mano con Julián López 'El Juli' en El Puerto que no piensa volver a vestirse de luces

Morante de la Puebla.

Morante de la Puebla. / EFE

José Antonio Morante de la Puebla, al término del mano a mano que mantuvo ayer con Julián López El Juli en la plaza de toros de El Puerto de Santa María, aseveró que no volverá a vestirse de luces. Morante declaró a Mundotoro: "Me voy del toreo, los presidentes y veterinarios me han aburrido". "El toro tan grande que sale hoy va en contra del toreo de arte, ya no puedo más", explicó el diestro sevillano, al término de su paseíllo en El Puerto de Santa María.

Morante se dirigió al citado medio para expresar esta decisión "por tiempo indefinido", insistiendo en que "lo peor de todo son los novilleros", porque "son los que más están padeciendo esta sinrazón". Preguntado sobre la posibilidad de un regreso, el propio torero afirmó: "Puede ser que algún día vuelva a los ruedos".Morante ya cortó en 2004 su temporada de manera repentina e indefinida. En aquella ocasión fue para recuperarse en Miami de una depresión tras un gris Domingo de Resurrección en Las Ventas con seis toros.

En 2007, a través de un comunicado, también se retiró por "haber perdido la ilusión", lo que comunicó a través de un comunicado: "Pido disculpas a mi afición y a las empresas que con su esfuerzo habían contado conmigo para sus plazas, pero también pido comprensión ante una decisión tan difícil para mí".Su carrera

José Antonio Morante Camacho (La Puebla del Río, 2 de octubre de 1979), Morante de la Puebla, se vistió de luces por primera vez en Villamanrique de la Condesa (Sevilla) el 3 de septiembre de 1988.

El debut como novillero en Madrid lo realizó el 23 de abril de 1995 con un novillo de Jiménez Pasquau y en Sevilla debutó el 10 de abril de 1996. En 1996 consiguió el Zapato de Oro de Arnedo.

Tomó la alternativa el 29 de junio de 1997 en Burgos, con César Rincón como padrino y Fernando Cepeda de testigo, con toros de Juan Pedro Domecq. El astado de su alternativa se llamaba Guerrero. Le cortó una oreja a cada uno de sus toros. Sus éxitos más relavantes los consigue en la Maestranza de Sevilla, abriendo la Puerta del Príncipe en 1999.

El 6 de junio de 2007 lidió seis toros de forma desinteresada en la tradicional corrida extraordinaria de la Beneficencia que se celebra anualmente en la plaza madrileña de Las Ventas, cortando una oreja. Poco después cortaría su temporada, alegando la pérdida de ilusión.

Volvió a los ruedos la tarde de Reyes de 2008 en la Monumental de México en un mano a mano con Rodolfo Rodríguez El Pana. Cortó dos orejas y abrió la puerta grande.

El 21 de mayo de 2009, ante un toro de Juan Pedro Domecq, y en San Isidro, Morante toreó con el capote al cuarto de la tarde de manera sublime en la plaza de Las Ventas.

En sus temporadas en activo no ha apostado por la cantidad, si bien en el año 2000 alcanzó las 72 corridas. Esta campaña, en la que ha sumado 22 corridas y ha cortado 12 orejas, ha sido pilar fundamental del abono en la temporada sevillana, sumando cinco corridas.

Torero artista

Representante fundamental de la torería sevillana, está considerado como uno de los toreros artistas más importantes de la historia. Sin duda, es uno de los mejores artífices en el toreo a la verónica. Cuando ha decidido poner banderillas, lo hace con naturalidad . Con la muleta ha sido capaz de asimilar y aunar tauromaquias tan maravillosas como las de Joselito el Gallo, Rafael el Gallo y otros toreros de corte artista, especialmente los sevillanos y recientemente del maestro Pepe Luis Vázquez.

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