Según los amantes de las estadísticas y los cálculos entre curiosos y absurdos, hoy es el día más triste del año. Algo que en los últimos tiempos, tan dados a bautizar con nombres en inglés todo, se ha llamado Blue Monday. Y no por el color del cielo. Da igual que este día el cielo esté solead o los nubarrones no dejen pasar ni un rayo.

Lo que empezó siendo una campaña publicitaria respaldadad por el investigador Cliff Arnall se ha convertido en dogma. Y es que la fórmula que demuestra que hoy es el lunes más triste del año parece convencer a base de asociar tristeza con bajas temperaturas, días cortos, vuelta a la rutina tras las vacaciones y larga espera hasta el próximo periodo de descanso.

En cualquier caso, es cierto que la cuesta de enero no sólo ataca a los bolsillos, monederos y carteras, sino también a los ánimos tras la euforia de las recientes fiestas. De hecho, se trata de uno de los períodos del año con mayor absentismo laboral, según la empresa de gestión enmpresarial Sage.

La fecha en el calendario ha servido para que las redes sociales se inunden de mensajes de ánimo y buenos propósitos para contrarrestar el que se supone que es el día más triste del año.Pero también hay empresas que intentan aprovechar el tirón de este día para ofrecer algún producto con el que ayudar a levantar el ánimo.

Al hilo de estas fórmulas y estadísticas todos buscan, como los personajes de los cuentos, su propia receta para perseguir la felicidad. Por esta razón, hay quien como Rumbo, la agencia de viajes on line, realiza estudios sobre el color que los españoles relacionan con la felicidad. Y el elegido es, curiosamente, el azul, una de las traducciones de la palabra inglesa blue. Esta encuesta ha sido realizada por One Poll en nombre de Rumbo durante este mes de enero, en una muestra de 2.000 adultos.

En cualquier caso, si la tristeza y la melancolía asoman por las rendijas del día, hay una serie de trucos para detenerlas. Para ello, entre otras premisas está que jefes y empresarios entiendan los efectos que la falta de motivación y entusiasmo pueden tener tanto en el propio trabajador como en la productividad del negocio. Para ello, es recomendable mantener reuniones con los trabajadores para conocer su situación y sus perspectivas laborales y asegurarse, en definitiva, de que se encuentran a gusto, ya que pueden estar afectados por más aspectos que los meramente laborales. Por ejemplo, la falta de luz solar durante el invierno puede conducir a un tipo de depresión clínica conocida como Transtorno Afectivo Estacional (TAE), con síntomas que incluyen cambios de humor, ansiedad y problemas de sueño.

Sea el día más triste del año, o sólo un lunes más, para sobrevivir a la tristeza hay varias recomendaciones. Una de ellas es escuchar música, y otra salir, quedar a tomar un café para, por ejemplo, planificar un viaje. Tan sólo imaginar a qué lugar ir ya provoca sentimientos de felicidad. Pero, sobre todo, una de las mejores maneras de pasar las pasar las malas rachas es apreciar lo que se tiene.