La empresa almeriense Vellsam Materias Bioactivas se encuentra en estas semanas testando la incidencia de dos productos sobre la producción de raíz en momentos críticos de la planta, donde previamente hubo pérdida de la misma por cuestiones fisiológicas o ambientales, en un ensayo de campo sobre un cultivo de pepino y en un ensayo de laboratorio sobre un cultivo de calabacín.

En el primero de los ensayos, que comenzó a realizarse hace un mes y medio y al que le resta aún otro mes para su finalización, se está comparando el uso de Enraivell, enraizante líquido de Vellsam rico en algas, aminoácidos específicos y materia orgánica y microelementos, y de Root Plus Green, otro enraizante de la compañía en estado sólido cuya composición es de dos aminoácidos específicos a mayores concentraciones, para ver la diferencia entre cada uno con respecto al testigo teniendo en cuenta todos los parámetros concernientes a la generación de raíz.

Todo ello, con la finalidad de regenerar en la mayor brevedad de tiempo posible las raíces de la planta, que cíclicamente se pierden una vez que esta tiene una carga considerable de frutos hasta que vuelven a crecer nuevamente.

“Queremos que ese comienzo se produzca lo más rápidamente posible y con la mayor cantidad de raíces”, explica Fernando Castilla, director técnico comercial de Vellsam Materias Bioactivas, que apunta que “se han colocado varias calicatas de 40 centímetros por 30 de profundidad para ver cómo las raíces penetran en el suelo. El sistema de cultivo es enficonado y normalmente las raíces se quedan en la fibra de coco, pero queríamos que no se queden ahí, sino que bajen a la tierra porque ahí está la ‘despensa’ de la planta”.

Después de un mes y medio de ensayo con Enraivell y Root Plus Green en esta finca en Vícar, en la que se está aplicando un tratamiento radicular cada semana en cada una de las parcelas, “ahora estamos en la época crítica, en la que el producto tiene que empezar a trabajar”, añade Castilla, que ve el cultivo “muy bien, pero tenemos que generar toda la raíz posible” en un cultivo “con una carga de frutos muy grande”.

Paralelamente, Vellsam se encuentra desarrollando el mismo ensayo en laboratorio en urnas de cristal en las que se ha plantado calabacín, una destinada a la aplicación del líquido y otra para el sólido frente a un testigo al que no se le aplica enraizante alguno, y donde se están viendo resultados bastante satisfactorios.

Vellsam Materias Bioactivas mantiene su apuesta por el I+D con ensayos fiables de cada uno de sus productos. El año pasado la empresa almeriense fue capaz de llevar a cabo hasta siete ensayos de eficacia de productos al mismo tiempo y próximamente comenzará otros nuevos con un nuevo calcio al cual se le ha añadido un componente extra para maximizar tanto el tronco como el grosor de la hora y la pared celular del fruto.