El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, Javier Jiménez, reclamó hoy al Consorcio Metropolitano de Transporte y al Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra "una solución inminente" para terminar con la huelga indefinida de los trabajadores de Casal que mañana cumple una semana.

En un comunicado, Jiménez reiteró la disposición del Grupo Popular hacia las partes implicadas para colaborar y "acabar con este problema que afecta a miles de alcalareños"· "Son muchas las personas que están sufriendo perjuicios personales y laborales por culpa de los retrasos", advirtió.

Por ello, el edil popular pidió a todos aquellos que tienen la oportunidad de llegar a un acuerdo que "agilicen las negociaciones", ya que mañana se cumple una semana desde que empezara la huelga indefinida y "no hay atisbos de solución".

Asimismo, Jiménez indicó que entiende la posición de los trabajadores, con los que desde el grupo popular "se ha solidarizado desde un principio", pero "no hay que olvidar", apuntó, que "son bastantes ciudadanos los que corren el riesgo de perder sus trabajos o de suspender exámenes por culpa de esta huelga".

Además, señaló que "lo que se vive en Alcalá estos días pone al descubierto la precaria situación de comunicación por medio de los transportes públicos de la ciudad con Sevilla y el resto del área metropolitana, basada, únicamente, en el autobús, a pesar de que desde 1995 el PSOE siempre ha prometido en sus programas electorales la construcción de una red de cercanías o una línea de metro, algo que todavía no ha llegado".

Por todo ello, Jiménez, que el jueves pasado llevó a Pleno un ruego en el que solicitaba la implicación del Gobierno Local en este asunto, volvió a solicitar un consenso de todos los grupos políticos alcalareños para "solucionar lo antes posible este problema".

Protesta ciudadana

Un grupo de vecinos de Alcalá se manifestaron por las calles de la localidad y hasta el Ayuntamiento alcalaíno en protesta por la huelga de los trabajadores de Casal, a quienes invitaron para que se movilizaran junto a ellos.

En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de empresa de Casal, José Manuel de la Portilla, señaló que un grupo de 40 trabajadores en huelga se desplazaron hasta Alcalá para participar en la protesta a invitación de los propios vecinos, quienes les hicieron llegar que su situación les afecta en su vida diaria.

La manifestación finalizó en el Consistorio alcalareño, donde estaba previsto que los vecinos se reunieran con el alcalde de la localidad, Antonio Gutiérrez Limones, pero al que no acudieron los trabajadores de Casal, porque, según explicó Portilla, no era su protesta. 

Siempre según el representante sindical, los vecinos mostraron al primer edil su desacuerdo con las medidas que se están tomando por la huelga, ya que "que la lanzadera no es todo lo que necesitan y creen que el Ayuntamiento puede hacer más".