La Policía Local de Granada liberó la pasada noche del domingo a una mujer de 26 años y natural de Tánger (Marruecos) a la que encontraron atada de pies y manos con cinta adhesiva en el pasillo de su casa de la capital tras recibir un aviso de robo. El portavoz policial, Juan Manuel Fernández, informó que los hechos sucedieron sobre las 23:30 del pasado domingo en un domicilio situado en la calle Rey Ben Ziri de la Zona Norte, al que entraron los agentes tras llamar varias veces a la puerta principal, que estaba abierta.

La casa se encontraba "totalmente revuelta, muebles rotos, con cuadros y demás objetos tirados por el suelo, objetos detrozadas e incluso armas de diferente tipo", informó este portavoz. Los agentes escucharon al entrar unos golpes y al buscar su origen encontraron a la mujer en el pasillo, atada de pies y manos y amordaza con cinta adhesiva.

Una vez liberada, la mujer relató a los agentes del cuerpo local, que un grupo de tres personas habían entrado en su casa y le habían golpeado y atado, asegurando que los presuntos asaltantes permanecieron en el interior de la vivienda hasta que se percataron de la llegada de las patrullas policiales, tras lo que se dieron a la fuga.

Los agentes, que encontraron en el suelo una navaja de grandes dimensiones y un casquillo de bala, avisaron a los servicios sanitarios para que la mujer fuera trasladada hasta un hospital de la capital, donde fue asistida.

La investigación continúa abierta y de ella se ha hecho cargo el Cuerpo Nacional de Policía, según añadieron las mismas fuentes.

La joven magrebí regresó ayer de nuevo a su vivienda, en esta ocasión, acompañada por un familiar, con el fin de ayudar a los agentes encargados de la investigación. La mujer se encontraba algo más recuperada del susto, aunque con el miedo propio de vivir un suceso de tales características.

Los vecinos de la zona se sorprendían ayer de los hechos acaecidos en este barrio granadino, ya que comentaban que nuncan habían escuchado grandes discusiones ni nada anormal en la vivienda.