El secretario general de CCOO de Andalucía, Francisco Carbonero, defendió ayer el buen hacer del sindicato tras conocerse la denuncia de la Fiscalía de Sevilla contra el secretario de Finanzas, Miguel Ángel Soto, por malversación, prevaricación y falsedad.

El pasado viernes trascendió la denuncia, que la Fiscalía dirige además contra a Esther Azorit Jiménez, directora general de Seguridad y Salud Laboral de la Junta, en relación a unas ayudas de 600.000 euros que supuestamente fueron destinadas a fines distintos de los previstos.

En rueda de prensa en Huelva, Carbonero aseguró que el sindicato no tiene "absolutamente ninguna preocupación" con este tema porque "no se ha hecho ningún uso indebido" de la ayudas y precisó que estos hechos deberían enmarcarse, "si hay algo", en "una corrección administrativa, como sucede cientos de veces". "Sin duda, si ha habido elementos de correcciones o errores de alguna cuestión, como se ha hecho siempre, habrá que realizar un reintegro, como ocurre cuando hay una subvención y no se gasta en su totalidad o cuando hay elementos que la Administración cree que no deben de entrar en la subvención", manifestó.

El líder sindical se referió a que noticias como ésta se produzcan "en la víspera de una huelga general", convocada para el 14 de noviembre. "No tenemos preocupación por eso, no hemos hecho ninguna cosa que no estuviera dentro de la normalidad; vamos a seguir trabajando y diciéndoles a los trabajadores que lo mejor que pueden hacer es estar organizados, porque lo mejor que le viene al resto es el desprestigio del movimiento sindical", señaló Carbonero.