Lío de familia en la comunidad farmacéutica andaluza. El TSJA ha dicho que las reglas de la Consejería de Salud para el concurso público de farmacias discriminan a los mayores de 65 años, a instancias de un recurso promovido por la patronal Ceofa. La Junta valora por su parte llevar esa sentencia al Supremo para que emita doctrina de casación. Y la plataforma que agrupa a los profesionales adjudicatarios en las fases ya desarrolladas del concurso acusa directamente a ciertos coletivos integrados por sus propios compañeros de reventar directamente este proceso administrativo, que ampliaría en 374 las boticas que se sumarían a las 3.550 aproximadamente que ya funcionan en Andalucía.

Según la plataforma de adjudicatarios, esta sentencia es "fruto de un concienzudo proceso de ataque al concurso por parte de algunos colectivos de farmacéuticos ya establecidos".

Además del entorpecimiento administrativo que supondría la paralización del concurso, ya hay estimaciones de daños valoradas en unos 6,6 millones de euros por parte de la asesoría TSL Consultores, en concepto de reclamaciones de tasas, lucro cesante e inversiones que ya se hayan podido realizar en nuevos locales. Que, de prosperar, tendría que asumir la Administración autonómica, lo que supone un argumento más para que la Consejería de Salud se anime a llevar el asunto al Supremo; acción que podría suponer la vigencia total o parcial del concurso hasta la nueva sentencia.

El concurso público fue la figura elegida por la Junta para abrir el abanico de candidatos a nuevas boticas y no contó con el respaldo unánime de la profesión.