El Consejo de Gobierno mostró ayer su criterio contrario a la toma en consideración de la proposición de ley para modificar el Consejo Consultivo, presentada por el PP, al considerar que el texto altera la naturaleza jurídica de este órgano. El portavoz del Ejecutivo, Juan Carlos Blanco, argumentó que la propuesta de los populares apuesta por cambiar la composición y el sistema de designación "perjudicando su objetividad e independencia".

El texto legislativo del PP plantea, entre otras medidas, la designación parlamentaria de siete de los nueve miembros; la posibilidad real de que ninguno de ellos haya tenido contacto alguno con la gestión administrativa en la Junta; la exclusión de las obligaciones que tendrían como altos cargos de la Junta -dotándolos de un sistema de declaración de intereses propio y aparte- y el nombramiento del presidente por el Parlamento de Andalucía.

También plantea, según el portavoz, la elevación de la memoria anual al Parlamento y no al Consejo de Gobierno; la atribución implícita a éste de competencias en el seguimiento de las medidas de mejora, y la atribución a la Mesa del Parlamento de la potestad para adaptar el reglamento de organización y funcionamiento. Además, Blanco explicó que, con la reforma que propone el PP, el Consultivo se convertiría en un órgano de control al Gobierno.