La directora general de Violencia de Género de la Consejería para la Igualdad y el Bienestar Social de la Junta, Soledad Ruiz, calificó de "indigno" que "un partido que aspira a gobernar hable de oídas y poco documentado", porque "no conoce la realidad de Andalucía, y lo que ha hecho el PP-A es cortar y pegar lo que le han mandado de Madrid, reflejando de este modo la realidad de todas y cada una de las comunidades que gobierna". Ruiz respondió así a las declaraciones de la portavoz del PP-A, Rosario Soto, en las que aseguraba que el Gobierno andaluz "está retirando fondos" y "dejando de dar subvenciones" a varias casas de acogida de mujeres víctimas de la violencia de género en municipios andaluces. Además, pidió al PSOE andaluz respeto ante el problema de la violencia de género y que, ante todo, no lo utilice "electoralmente".

Las críticas de Soto respondían a unas declaraciones de la consejera para la Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, en las que había calificado de "barbaridad" que el Gobierno de Castilla-La Mancha, presidido por la popular María Dolores de Cospedal, haya cancelado los convenios con las casas de acogida de mujeres víctimas de la violencia de género, ya que esa medida va "en contra de su seguridad".

La directora general competente en esta materia del departamento que dirige Navarro añadió, en referencia a las críticas del PP, que le parece "aún más inmoral" que los populares planteen este tipo de cuestiones, cuando "se acaba de ver en el Parlamento el informe anual en el que se evalúan todas las medidas de la Junta". Además, "deberían saber que desde 1998 el Ejecutivo tiene un sistema público que atiende a las mujeres víctimas de violencia de género, tanto fuera como dentro de las casa de acogida", aseguró Ruiz. La directora de Violencia de Género indicó que "alrededor de 1.000 mujeres y otros 1.100 niños que las acompañan [a las víctimas] están pasando por las casas de acogida andaluza". "El PP -dijo Ruiz- tiene un empeño en defender a sus compañeros, defendiendo una posición partidista en lugar de defender a las víctimas".