La salida de Micaela Navarro como consejera para la Igualdad y Bienestar Social ha sido la menos compartida de las decisiones tomadas por el presidente de la Junta, José Antonio Griñán. El PSOE de Jaén ha expresado su disgusto por la que consideran su consejera y que era una de las más valoradas de la Junta en las distintas encuestas, expusieron fuentes de los socialistas jiennenses.

La salida de Navarro se ha interpretado como una vendetta por su apoyo manifiesto a Alfredo Pérez Rubalcaba en el congreso federal. Además se le acusó de prever una reunión para preparar el relevo de Griñán si los resultados de las elecciones andaluzas eran adversos, algo que no ha pasado de la esfera de la rumorología y el interés particular de algunos sectores con ánimo de revancha.

Griñán finalmente accedió a las presiones que le recomendaban dejar fuera del Gobierno a Navarro, a la que Chaves encomendó la nueva consejería para la Igualdad y Bienestar Social hace ocho años y que ahora se desgaja. Preguntado al respecto ayer por los periodistas, Griñán no tuvo palabras concretas. "No hay ninguna razón en especial", apuntó.

En una entrevista con Canal Sur Televisión, Griñán razonó que las competencias de Igualdad se trasladan a la Consejería de Presidencia, con Susana Díaz, para implementarles transversalidad. "¿Dónde mejor que en Presidencia?", aseguró.

El bloque de políticas sociales que llevaba la consejería de Navarro van a parar a Salud, donde resiste María Jesús Montero, la única en el cargo desde 2004.

Menos llorada fue la ausencia de Manuel Recio, protagonista en primera persona del caso de los ERE y conocido por sus incursiones en las redes sociales. Dos años después de acceder a la Consejería de Empleo, Recio se despide con un desolador bagaje bajo del brazo (34% de desempleo en la comunidad) y un fraude en los fondos de empleo, sobrevenido, que no ha sido capaz de controlar ni explicar con claridad.

Como Almería, Cádiz también se queda sin representante en este nuevo gobierno sin cuotas provinciales. Sale Francisco Menacho, que relevó a Luis Pizarro cuando dimitió por el cese del delegado provincial. Menacho lidera la corriente alternativa a los cuadros actuales en el PSOE de Cádiz, con Francisco González Cabaña al frente. El grupo no ha encontrado respaldo en las designaciones de Griñán, pero confía en el segundo escalón de mandos.

Un futuro más boyante parece que tendrá el ex consejero de Educación Francisco Álvarez de la Chica, que podría tener un puesto relevante en la ejecutiva del partido que se renovará este verano.

Todos los aludidos, al igual que el ex consejero de Cultura, Paulino Plata, y el de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, son diputados en el Parlamento andaluz, por lo que no se marcharán a casa sin nada.

No tiene esta condición la ex consejera de Obras Públicas Josefina Cruz Villalón, que no mostró interés en continuar en sus funciones o integrarse en las listas a las autonómicas.

Clara Aguilera, ex consejera de Agricultura, renunció a ser consejera hace unos días, probablemente cuando conoció que no iba a continuar. Griñán tuvo ayer sentidas palabras ante su ausencia en el acto, de duelo por el fallecimiento repentino de un hermano.