La consejera para la Igualdad y el Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, afirmó que el debate sobre la responsabilidad que han de asumir los menores de 14 años que cometan un delito es "absolutamente necesario" pero "desde la serenidad" y, sobre todo, "sin utilizar el dolor de ninguna familia como rédito político".

Navarro consideró que, no obstante, "no resolvemos nada" aplicando la responsabilidad penal a un menor de 14 años, inimputable según la vigente Ley del Menor, porque "por muy amplia que sea la condena, tarde o temprano tendrá que reincorporarse a la sociedad". 

"Hay que plantearse que algo hay que hacer, es evidente, y sin que nadie eluda la más mínima responsabilidad, a través de una reflexión profunda de por qué suceden estos casos", afirmó en referencia a los últimos casos de presuntas agresiones sexuales perpetradas por menores de edad.

Además, tal y como apuntó, si bajamos la edad penal a los 12 años, tal y como ha pedido el PP, y más tarde surge un caso semejante, pero esta vez cometido por un menor de 10 años, habrá que bajar la edad penal a los 10, y si nos seguimos moviendo en función de lo que nos pide el cuerpo a cualquier ciudadano acabaremos exigiendo que exista responsabilidad penal desde que nacen".

La consejera afirmó que entiende "perfectamente cualquier cosa que se les pueda pasar por la cabeza y cualquier petición que hagan" las familias de las víctimas afectadas por estas agresiones como a otras muchas, entre ellas, los padres de la joven sevillana desaparecida y presuntamente asesinada Marta del Castillo, quienes "se acuestan cada noche sabiendo lo que le ha pasado a su hija pero sin saber donde está", pero advirtió de que el resto de la sociedad "debemos de tener más serenidad".

Especial cautela hay que tener, indicó la consejera, en el ámbito político, ya que "no se puede utilizar el dolor de ninguna familia y el rechazo que generan este tipo de acontecimientos en el resto de la sociedad para tratar de sacar rédito político". 

"Hay que tener más responsabilidad de la que en este momento esta demostrando el PP, porque se escandalizan de que una niña de 16 años pueda tomar decisiones como interrumpir un embarazo no deseado y, sin embargo, opinan que un menor de 12 años si está en condiciones de asumir responsabilidades penales", criticó, haciendo hincapié en que "es necesario centrar el debate".

En este sentido, opinó que el debate es "absolutamente necesario" que lo tengamos, pero también consideró que "nadie quiere entrar ante el temor de que se entienda que se trata de culpabilizar a alguien en concreto", apuntando que "todos tenemos que asumir determinadas parcelas de responsabilidad ante estos comportamientos".

No obstante, señaló que "los primeros responsables" de los hijos son sus padres y madres, quienes, durante su crecimiento y formación "tienen que imponerles una serie de límites sin esperar a que lo hagamos la administración pública, porque cuando lo hace es porque han fallado otra cosas y el daño que se les puede infringir es irreversible y sólo comparable con el que ellos hayan podido causar a otras personas".

"Hace falta que tengamos este debate de forma serena y tranquila, un debate que será complejo y difícil de trasladar y que puede que no tenga los mismos réditos políticos a corto plazo que le gusta al PP, porque hay que cuidar mucho temas tan delicados como este, en el que hay implicadas familias que están sufriendo mucho", apuntó.