Las orientaciones pastorales de los obispos andaluces generaron ayer reacciones en tromba entre las filas de PSOE e IU. Ninguno de los dos partidos aceptó las indicaciones al electorado católico y de "buena voluntad" dictadas por los prelados, al que instaban a rechazar aquellos proyectos políticos proclives a la ampliación de la ley del aborto o de la eutanasia, e invitaron a la Iglesia a que se presente a las elecciones.

Desde el Gobierno central, el ministro de Sanidad y candidato por Alicante del PSOE al Congreso, Bernat Soria, reclamó al PP que diga si los obispos son sus "portavoces" para que "los ciudadanos se aclaren". Pese a mostrar su respeto a la opinión de éstos, defendió que "para meterse en política es mejor estar directamente en un partido político".

La misma tesis fue compartida por los consejeros de la Presidencia y Cultura, Gaspar Zarrías y Rosa Torres, que constataron el alto nivel de coincidencia del mensaje eclesiástico con el de los populares, lo que llevó a Torres a decir que lo "más transparente" sería que "algún miembro de la Iglesia se incluyera en las listas del PP".

La alcaldesa de Córdoba, Rosa Aquilar, apuntó que lo mejor que podían hacer lo obispos es "no meterse en política", pero en caso de querer participar y pedir el voto, les invitó a que se presenten a los comicios. El coordinador de IU y candidato a la Presidencia, Diego Valderas, aseguró que "lo que está claro es que votar PP es votar sotana de obispos, que dista mucho de los valores del cristianismo".

Populares y andalucistas permanecieron al margen y sostuvieron que las opiniones de los prelados "deben ser respetadas", por ser "tan lógicas como otras", además de una prueba de libertad y democracia.

Ante la polémica suscitada, el cardenal arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo, negó que los Obispos del Sur pretendieran orientar el voto y remarcó que "siempre" emiten una nota pastoral en época electoral para recordar la doctrina social católica. Afirmó que "prácticamente" desde que comenzó la democracia en España "los obispos, antes de las elecciones siempre suelen hacer un comunicado", por lo que "no es nada extraño ni nuevo".