China es un mercado objetivo y prioritario para cualquier sector económico que se precie. Más de 1.300 millones de potenciales clientes obligan. España desea abrir líneas de negocio y aprovecharse de su crecimiento, también en cuestiones de turismo. El destino español quiere aprovecharse del auge turístico que vive el gigante asiático e incrementar la llegada de turistas chinos. Así lo manifestó ayer el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, que presentó durante su visita oficial al país oriental el Plan Turismo China, que tiene como objetivo que 300.000 turistas chinos visiten España en 2012 y un millón lo haga en 2020.

Este plan incluirá acciones para adaptar la oferta española a las particularidades del turismo chino, cuyos viajeros se muestran muy interesados en los segmentos de cultura y golf que oferta España. Entre las acciones previstas están la elaboración de guías sobre España en mandarín, la adaptación de los horarios de comidas y la formación de guías bilingües.

También se reforzarán las campañas de promoción en el país asiático y se explorarán diferentes vías para aumentar la frecuencia de conexiones aéreas directas entre China y España, avanzó Sebastián.

Industria considera, en este sentido, que el mercado chino es el que "más potencial de crecimiento tiene en el mundo". En 2009 llegaron a España 89.523 turistas chinos, un 2,9% más que en 2008, y en los últimos diez años el crecimiento ha sido del 470%. "No es de recibo que España tenga 53 millones de turistas anuales pero sólo 90.000 chinos", apostilló el ministro.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya mostró el pasado agosto el interés de España en captar este turista. El destino nacional, además, es el segundo europeo de visitantes chinos. España tiene dos oficinas de Turismo en China, en Pekín y en Cantón, que durante este año han realizado 73 actuaciones de promoción, han participado en cuatro ferias de turismo en China y han trabajado con 177 agentes de viajes de ese país.