Recién acabado el primer año de la X Legislatura del Parlamento, Ciudadanos ha elaborado un esquema sobre el grado de cumplimiento de los puntos incluidos en el acuerdo que permitió a Susana Díaz acceder a la Presidencia de la Junta de Andalucía. Una veintena ejecutados o en vías de cumplirse, resume el diputado onubense Julio Díaz, uno de los negociadores del pacto con el PSOE, su ex partido como es frecuentemente recordado en el Parlamento, del que salió en 2013. "No hubiera vuelto a la política si no es por Ciudadanos, para regenerar la vida política". Es uno de los protagonistas de este primer tramo de legislatura al presidir la comisión de investigación de los cursos de formación.

-¿Espera un resultado efectivo de la comisión de investigación?

-Soy de los que piensa que los resultados efectivos se están dando ya. Primero porque se aprobó por unanimidad y eso es importante. La comisión también obliga a que haya mucha negociación y contacto entre los grupos. Y nos va a llevar a un dictamen que no sólo determine responsabilidades políticas sino que sugiera mejoras en los procesos de la formación profesional para el empleo en Andalucía. Es una comisión que está muy viva y por ahí va a pasar gente que tuvo responsabilidad. Esperemos que la formación salga reforzada.

-¿Cuáles son sus primeras conclusiones?

-Se van apuntando algunas bastante claras. La falta de recursos destinados no sólo a la gestión, sino al control y a la posterior justificación y a lo que es el proceso en general. Y desde luego la carencia de una evaluación real de las políticas públicas, que es una cuestión que preocupa mucho a los diputados. La empleabilidad no se ha ajustado a lo esperado, se ha empleado mucho dinero en una formación que no ha tenido mucha repercusión en el empleo y ni siquiera se ha hecho un control exhaustivo como se merece. Y parece que ha tenido un impacto importante en algunas empresas que han prestado sus servicios y a las que se les está pidiendo el reintegro. Para nosotros es muy triste ver cómo algunas formaciones quieren convertir la comisión en un circo. Y lo que queremos es que se normalicen estos instrumentos de control. Que dentro de unos años la gente pida acudir a este tipo de comisiones a explicarse, no como ahora, que parece que van con el corazón compungido. Entiendo que al partido que sustentaba el Gobierno no le guste, porque está examinando su gobierno.

-¿A qué o quién se refiere cuando dice que se quiere convertir la comisión en un circo?

-El PP está constantemente retorciendo lo que pasa, parece que están ávidos de recuperar fuelle electoral y la están utilizando como una herramienta política. Podemos también ha dado muestras, hace poco se levantaron y se fueron a la Feria. Y el PSOE también algunas veces, en su ardor guerrero de defensa de su labor, hace algunas cosas complicadas de entender. Nosotros estamos centrados en que los objetivos se cumplan.

-¿Usted diría que la Junta ha estado obstruyendo la labor de la comisión de investigación?

-Creo que la Junta debería haber sido más diligente en el envío de la documentación, podía haber colaborado mucho más, de forma más rápida y certera. Confío en que el Gobierno cumpla lo que tiene que cumplir, yo como presidente estoy cumpliendo lo que debo, algo que también se dudó.

-Ciudadanos se ha enfrentado a acusaciones de seguidismo al PSOE con la comisión, el veto a iniciativas de la oposición o la aprobación del presupuesto. ¿Se arrepienten de alguna decisión?

-De ninguna. Andalucía necesitaba un presupuesto. Era una oportunidad para introducir elementos nuevos en el acuerdo con el PSOE: un aumento de inversión en educación y sanidad, apoyo a los autónomos, etcétera. Eso no es seguidismo del PSOE. Decimos lo mismo en todos sitios, queremos cambio y estabilidad. Hacer reformas estructurales y de calado, pero sin aportar inestabilidad.

-¿Pedirán la dimisión del consejero Ramírez de Arellano?

-Hay una investigación abierta. Si resulta investigado finalmente, como en todos los casos, cuando llegue el momento en el que haya que pedir la dimisión la pediremos.

-¿El pacto con el PSOE en Madrid sigue siendo válido?

-Eso lo tendrán que determinar en Madrid. Ahora es válido y reivindicado, es fruto de muchas horas de trabajo, no de postureo. Y el documento se ha mejorado tras un contacto intenso con la sociedad civil. Habrá que ver por qué los demás se enrocan en sus posturas y piden ministerios o el CNI y otras cuestiones tan sociales, como hace Podemos. Nosotros no vamos a estar en negociar la unidad del país o en medidas de poca cordura.