DERBI Betis y Sevilla ya velan armas para el derbi

Andalucía

El gran reto del empleo

  • El impacto de la pandemia sólo se compara con el inicio de la Guerra Civil

Una pintada en una calle de Sevilla.

Una pintada en una calle de Sevilla.

A comienzos de 2019 Andalucía alcanzó su mejor registro histórico en empleo, con cerca de 3.200.000 afiliados a la Seguridad Social, superando el anterior récord de 2008. Este nivel se logró partiendo de poco más de 2.600.000 afiliados en septiembre de 2013, tras perderse casi 200.000 empleos adicionales desde 2011. Eran los peores datos en una década, a los que se enfrentaba el nuevo gobierno de la Junta de Andalucía, que presidía Susana Díaz.

La crisis del empleo era también debida a una profunda crisis empresarial, que había provocado la desaparición de más de 50.000 empresas en esos años. La recuperación del empleo y la restauración del tejido empresarial, mejorando ambos también en términos cualitativos, eran los dos principales objetivos estratégicos de la Agenda por el Empleo 2014-2020, aprobado entonces por el recién estrenado gobierno. Se fijaba un compromiso que dio certidumbre a los actores económicos, institucionales y políticos, con los que se buscaron alianzas y acuerdos. En enero de 2019 Andalucía registraba cerca de 520.000 empresas, volviendo a los valores anteriores a la crisis.

Se cumplieron así los objetivos de la Agenda. El buen liderazgo, la actuación decidida y convencida, y, como decimos, la certidumbre, fueron claves para el éxito, que no era sólo del Gobierno, sino de la sociedad, de trabajadores y de empresarios.

La gran recesión de 2008 se desarrolló durante cinco años y hasta 2018, como se ha dicho, no recuperamos los niveles de indicadores previos, incluyendo el PIB. La crisis actual,; ocasionada por una pandemia de dimensiones globales, profunda y de características aún inciertas, se ha desarrollado en sólo mes y medio y ha provocado el mayor impacto económico conocido en tan breve espacio de tiempo. En España, sólo en los inicios de la Guerra Civil de 1936 podemos encontrar un precedente en intensidad.

Frenar la crisis sanitaria ha sido la primera tarea. Con toda la prudencia que el momento requiere, parece que hemos logrado entre todos detener este brote, aprendiendo de paso, de manera dura y trágica, que no debemos relajar nuestra actitud y nuestro compromiso para evitar futuras reincidencias. Si llegan debemos saber controlarlas, y compatibilizarlas con un país en funcionamiento.

¿Cuál ha sido el impacto sobre el empleo en Andalucía? Incluidos los expedientes temporales, ascienden a casi 800.000 los empleos que se han visto afectados, lo que supone un 25% de todos los existentes en nuestra región. Esto implica que a finales de abril sólo unos 2.150.000 andaluces estaban cotizando a la Seguridad Social. Son números del año 1999. Sin las inmediatas medidas de protección que ha tomado el Gobierno de España, en Andalucía hubiéramos superado los 1.600.000 parados. En el corto plazo, las medidas de preservación temporal del empleo han protegido también a las empresas, a las que igualmente se ha defendido garantizando el crédito y la liquidez.

Lecciones aprendidas de la crisis de 2008, que han permitido actuar con rapidez yeficacia.Con un impacto en el PIB de 2020 en los dos dígitos en Andalucía, se ha estimado que el paro superará de nuevo el 30% en nuestra región. Este será el desafío de medio y largo plazo en el que el actual Gobierno de Andalucía debe estar especialmente comprometido, como lo estuvo el anterior Ejecutivo.

Hemos tendido la mano al Gobierno andaluz. Hemos pedido una actuación urgente, con planes de choque para defender el empleo, y atención especial a los jóvenes y a sectores sensibles, como el turismo. En un enfoque más amplio, hemos reclamado impulsar la inversión generadora de empleo. Se debe recuperar la confianza empresarial, responsable del 80% de la inversión total en la economía, y realizar un esfuerzo adicional de inversión pública, para lo que hemos propuesto reprogramar y acelerar la ejecución de más de 4.500 millones de euros de los Fondos Europeos disponibles en Andalucía.

El reto no sólo será cuántos empleos, sino también qué empleos para lograr una economía más sólida y resistente a futuras crisis, manteniendo nuestros valores de carácter social. La Agenda 2030 de Naciones Unidas y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) señalan una línea de amplio consenso. Debemos invertir en promover la salud, en aliviar la pobreza, en mejorar la educación, en garantizar la igualdad de oportunidades y de género, en luchar contra el cambio climático, en fomentar una economía innovadora, entre otros. Los objetivos ODS son autopistas hacia un futuro mejor. Empecemos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios