Peregrinos de todos los confines del planeta acuden anualmente, vieira al frente, a venerar las reliquias del apóstol Santiago. Un trayecto que supera los límites de la devoción, para convertirse en todo un itinerario cultural, con crecientes tintes turísticos. Y que además, sorprende con historias humanas dignas de alabar, donde la solidaridad se alza por bandera.

Una de ellas llega desde Pilas. Este pueblo del Aljarafe sevillano, 1.032 kilómetros distante de la puerta del Obradoiro, es el punto de partida de cinco valientes ciclistas, que ataviados con alforjas, maillots conmemorativos y altas dosis de ilusión y humanidad, recorrerán el denominado Camino de Vida, forjado a través del impulso de una activa asociación de lucha contra el cáncer, Alusvi.

Estamos ante un proyecto solidario que consiste en recorrer en bicicleta el trayecto entre Pilas y Santiago de Compostela, esos 1.032 kilómetros referidos a través de la Vía de la Plata, y que tiene como objetivos fundamentales la recaudación de fondos destinados proyectos de investigación de lucha contra el cáncer y movilización ciudadana, concienciando a la sociedad de la importancia de esta lucha. Los métodos de recaudación establecidos se conseguirán a través de los llamados kilómetros solidarios, ya que gracias a la difusión de la aventura, se podrá aportar un euro por kilómetro recorrido. Además, se fomenta también el apadrinamiento de pueblos y ciudades visitadas en su periplo, a cinco euros por localidad. Igualmente se están distribuyendo pulseras conmemorativas, y se disponen de huchas en muchos comercios locales, todo ello con la idea de involucrar al grueso de la sociedad. En cada uno de los albergues en los que se alojen, dejarán una bandera conmemorativa, para difundir el proyecto entre los caminantes.

Uno de los impulsores de esta iniciativa es Antonio Márquez, Secretario de Alusvi y miembro de la Junta Directiva de Cyclopilas, el club ciclista de la localidad. Antonio, que ya conoce las vicisitudes de hacer un camino de Santiago en bicicleta, tuvo la idea de repetirlo, pero añadiéndole el motivo solidario antes descrito. "Estamos necesitados de concienciar, es una forma de ayudar a los objetivos de la Alusvi. Toda ayuda que podamos recibir es buena". De esta forma, en enero puso en marcha un proyecto en el que involucró a cuatro compañeros más, que junto a él empezarán a dar pedales el próximo 20 de julio. No obstante, ya han realizado la etapa previa para la recogida de la credencial del Camino de Santiago en la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Sevilla, ruta simbólica que hicieron en bicicleta desde Pilas y para la que contaron con la compañía de numerosos ciclistas locales.

El empuje de Antonio Márquez, veterano en el Camino de Santiago, hizo que Jesús Manuel Moreno se sumara al proyecto. Este pileño, también amante del ciclismo, y a la sazón, Presidente de la Asociación de Empresarios de la localidad, se sumó a una idea solidaria, movido por "la ilusión de hacer el Camino de Santiago y apoyar este proyecto, que es una idea fantástica". Jesús Manuel incide en la importancia de colaborar con esta asociación, y desvela la petición que le hará al Santo a su llegada al Obradoiro: "Mi intención es pedirle por las personas enfermas de cáncer". El verdadero motivo que mueve este proyecto, hacerlos que luchen y sonríen por la vida, como reza el lema de esta activa asociación pileña.