Emprender una búsqueda de elementos comunes entre Tomares e Islandia, puede resultarnos, a priori, harto complicado. Pero si a esta conjunción sumamos otros siete emplazamientos más, la posibilidad de relacionarlos entre sí se complica hasta límites inverosímiles. Nada más lejos de la realidad, entre Tomares, Islandia, Noruega, Bélgica, Alemania, Gran Bretaña, Turquía y Portugal hay un nexo de unión, un motivo de relación, que no es otro que el intercambio de conocimientos y experiencias como motores educativos en el Instituto.

De esta forma se idea el proyecto Comenius, diseñado y coordinado desde Tomares, a través del nuevo instituto Ítaca, inaugurado el pasado curso escolar. "Se ha creado una asociación multilateral de escuelas en las que se trabaja de manera conjunta en varios proyectos, y que contempla intercambios para que los alumnos conozcan otras culturas", explica Carmen Lázaro, Directora de este centro educativo. Ítaca destaca, entre otras cuestiones, por una especial atención a la internacionalización de sus programas, ya que además de ser un centro bilingüe, dispone de un departamento de programas internacionales, "que no suele existir en otros centros y que trabaja en uno de nuestros ejes de trabajo más importantes, como son la proyección internacional y el contacto con centros de otros países", argumenta Teresa Lázaro, jefa de Estudios.

El responsable del citado ente educativo del Ítaca es José Manuel Rodríguez Parente, también profesor coordinador del proyecto Comenius. "Nuestro objetivo es que a través de la participación en este proyecto educativo multilateral, fomentemos entre los jóvenes participantes una doble reflexión colectiva, relacionada con qué elementos de similitud existen entre otras comunidades europeas y cómo se imbrican las dimensiones Andalucía, España y Europa en un contexto de ciudadanía global", según explica el coordinador.

No obstante, a esta iniciativa le queda camino por recorrer. Acaban de recibir una visita preparatoria ideada para elaborar la solicitud y redactar el proyecto, pero ahora deben esperar a junio para saber si realmente la decisión es positiva. "Esta la visita cada clase preparó un recibimiento para un país. Investigaron sobre el país y realizaron una exposición sobre los aspectos más significativos, después preguntaron al profesor extranjero. En todas las clases la curiosidad sobre la vida de los jóvenes de otros países era muy grande y realizaron innumerables preguntas acerca del funcionamiento de sus institutos y muchas otras cuestiones", relata la jefa de estudios, que además, redunda en la importancia que a niveles de motivación tienen estas iniciativas entre el alumnado. "Tienen muchas ganas de trabajar con otros jóvenes de toros países".

El profesorado también ha acogido el proyecto con gran entusiasmo. Según la directora del centro, "no es habitual que el 85% de los profesores se impliquen en un proyecto así, con la carga de trabajo añadido que supone. Esa es una de las razones por las que hemos decidido a coordinar un proyecto de tal envergadura".

Aún a la espera del visto bueno para la definitiva puesta en marcha, estamos ante un ejemplo de buenas praxis educativas. A pesar de no ser el primer proyecto transnacional que se coordina desde Andalucía, ni desde Sevilla, ni desde Tomares, pero uno de los más especiales, por la cantidad de países que están involucrados y la ilusión depositadas por alumnos y profesores de este centro de reciente creación.