FERIA Toros en Sevilla hoy | Manuel Jesús 'El Cid', Daniel Luque y Emilio de Justo en la Maestranza

Cine

Berlín y el amigo americano

  • El cine estadounidense tendrá una importante presencia desde hoy en la Berlinale, donde se verá también lo último de Panahi, Seidl, Dumont, Loach, Sangsoo o Wong Kar-wai.

La selecta cinefilia siempre ha mirado con cierto recelo al Festival de Berlín, primera gran cita europea del año (con permiso de Rotterdam), siempre sospechosa de las pleitesías (el "compromiso social", principal lema de la era Dieter Kosslik) y los peajes de un festival de categoría A con 62 ediciones a sus espaldas, y el primero en lanzar, junto a Sundance, algunas de las tendencias de la temporada para los principales distribuidores internacionales de cine de autor.

El viejo amigo americano se nos antoja este año más amigo y deseable que nunca en su presencia berlinesa: Gus Vant Sant, Richard Linklater, Steven Soderbergh, Noah Baumbach, David Gordon Green o los debutantes James Franco (Leather bar) y Joseph Gordon-Levitt (Don Jon's addiction), actores de moda en la cresta la ola, presentan sus nuevos trabajos en la Sección Oficial o Panorama desde hoy hasta el próximo día 17, para regocijo de la prensa y los cazadores de autógrafos que, durante semana y media, recorren arriba y abajo Potsdamerplatz.

Van Sant sigue en modo menor tras su periplo experimental pero tal vez con una mirada más sabia, lírica y elocuente, capaz de tocar de gracia a materiales que, como el guion de Matt Damon para la estupenda Promised Land, responde página a página a ciertos modelos dramáticos made in Sundance. Su retrato del desencanto y la dignidad de una pequeña comunidad rural en tiempos de crisis deja estampas de contagioso idealismo humanista que prolongan una de las mejores tradiciones del cine USA de todos los tiempos (y sí, me refiero a Ford). A su lado, un Linklater en plena forma (aún esperamos ver Bernie por aquí) prolonga las cuitas románticas de Ethan Hawke y Julie Delpy en Before Midnight tras las celebradas Antes del amanecer y Antes del atardecer.

Soderbergh amaga de nuevo con retirarse, pero ya no hay quien le crea. A Berlín trae Side effects, un thriller farmacéutico ambientado en Nueva York. Baumbach recupera a la siempre deslumbrante Greta Gerwig en su nueva comedia dramática, Frances Ha, mientras que Gordon Green, esperanza blanca reconvertida en director de comedias generacionales o excéntricas, traerá Prince Avalanche, con Paul Rudd.

Berlín ha sido siempre puerta de entrada en Occidente del nuevo cine iraní (véase el boom Farhadi) y Jafar Panahi uno de sus directores más queridos. El cineasta, que sigue bajo arresto domiciliario en Teherán por motivos políticos, presenta Closed curtain tras la extraordinaria Esto no es una película, una nueva muestra de desafío creativo ante la adversidad. Junto a él, los cines periféricos traen a Berlín a dos grandes nombres: el hongkonés Wong Kar-wai, quien, además de presidir el jurado (en el que también estarán Tim Robbins, Susanne Bier, Andreas Dresen o Shirin Neshat), presentará su nuevo y esperado filme, The Grandmaster, biopic de fantasía del mismísimo Bruce Lee, y nuestro surcoreano favorito, Hong Sangsoo, quien, a ritmo de dos películas por año, sigue realizando sutiles y complejas variaciones sobre el amor, el azar y las segundas oportunidades de toda ficción. Nobody's daughter es su bolo berlinés cuando, al parecer, ya prepara entregas para Cannes y Venecia. La cinta alemana ambientada en Sudáfrica Layla Fourie, de Pia Marais, y la canadiense Vic+Flo ont vu un ours, de Denis Côté, completan la cuota del cine del mundo en sección oficial.

El cine europeo estará bien representado por algunos pesos pesados de la última ola autorial: el austriaco Ulrich Seidl completa su trilogía del Paraíso con Hope después de pasear (es un decir) Amor y Fe por los festivales de 2012. El no menos severo y misántropo Bruno Dumont vuelve a la vida de Camille Claudel en el filme homónimo protagonizado por una Juliette Binoche dispuesta, suponemos, a darlo todo por la causa atormentada. Otras presencias europeas serán las del bosnio Danis Tanovic (Harmony lessons), el ruso Boris Khlebnikov (An episode on the life of an iron picker), el sueco Bille August (Night train to Lisbon), los franceses Emmanuelle Bercot (Elle s'en va) y Guillaume Nicloux (La religiosa, a partir de Diderot), la polaca Malgoska Szumowska (En el nombre de...), el kazajo Emir Baigazin (Uroki Garmonii), el fiable alemán Thomas Arslan (Gold) o el veterano Ken Loach, quien con su documental The spirit of 45 incide en la herencia del thatcherismo en Gran Bretaña.

La representación española, siempre escasa y marginal, y sin Ventura Pons a la vista, se limita al pase en Panorama de Ayer no termina nunca, de Isabel Coixet, La Plaga, de Neus Ballus, en la sección Forum, y la participación en Gloria, la cinta chilena dirigida por Sebastián Lelio.

Una retrospectiva sobre la influencia internacional del cine de la República de Weimar y un ciclo-homenaje a Claude Lanzmann, autor de la monumental Shoah, completan los principales eventos de la sexagesimotercera Berlinale.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios