Jefa por accidente | Crítica

Comedia de empoderamiento

Jennifer López, en 'Jefa por accidente'.

Jennifer López, en 'Jefa por accidente'.

Peter Segal no es un gran talento, para qué lo vamos a negar. Pero le agradezco que dirigiera uno de los Leslie Nielsen (Agárralo como puedas 33 1/3. El insulto final) que incluye una apoteósica entrega de los Oscar, el tour de force no del todo despreciable de unir a De Niro y a Stallone (con ribetes de broma a lo Sunset Boulevard entre Swanson y Von Stroheim enfrentando a quienes fueron Rocky y Jack LaMotta con el añadido morboso de que Rocky le arrebatara el Oscar a Taxi Driver) en La gran revancha y sobre todo que dirigiera a Jack Lemmon y Lauren Bacall en Mis queridos compatriotas. Lo demás es olvidable salvo que se sea fan de Adam Sandler, a quien dirigió en Ejecutivo agresivo, 50 primeras citas y El clan de los rompehuesos.

De Jefa por accidente se puede decir lo mismo para fans de Jennifer López, que aquí interpreta un papel ultra políticamente correcto de mujer latina inteligente y voluntariosa segregada tanto por su doble condición femenina y latina como por su falta de titulación a la que la vida (y algún que otro truco) da una oportunidad para demostrar su valía y alcanzar sus sueños (que son de poder, posición y dinero, naturalmente). El tema del currículo inflado le otorga una curiosa actualidad con relación a la política española. Cumple las expectativas de quienes gustan de comedias de empoderamiento femenino y latino. Y por supuesto de los fans de López.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios