DIRECTO Madrugá Sevilla en directo | Semana Santa 2024

Previsión El tiempo en Sevilla para este Viernes Santo

CINE

Los viejos amigos vuelven a las andadas

  • El tiempo pasa por fuera pero no por dentro de los personajes de 'American Pie' que hoy se reencuentran con los espectadores.

American Pie es de estos fenómenos que crean escuela. En teoría fue un film que recuperaba las gamberradas de las míticas películas de grupos de adolescentes salidos y destroyers que John Belushi y compañía hacían en los 70, tipo Desmadre a la americana. Sin embargo, estas propuestas degeneraron a lo largo de los 80 y 90 en filmes similares pero sin ninguna pólvora, muchos de ellos inofensivos. American Pie, con su ya icónica tarta de manzana que justifica el título, elevo el listón con una propuesta que aumentaba el nivel sexual y era para adultos. Esta reformulación del género demostró que había un público para ello y abrió el camino a los cada vez más descafeinados hermanos Farrelly y a la factoría de Judd Apatow, que realiza obras macarras y gamberras pero con un punto que le ha ganado adhesiones en parte de la crítica.

Como todo en esta vida del cine, American Pie fue languideciendo en secuelas cada vez más inocuas, cuyas últimas entregas ya se estrenaron directamente en DVD en nuestro país, mientras títulos como Lío embarazoso o Resacón en Las Vegas mostraban su legado. Una muestra de que esta comedia de 1999 tenía a gente ambiciosa detrás está en la carrera posterior de Chris Weitz, uno de sus directores junto a su hermano Paul. Frente a los funcionarios de la comedia que proliferan en el Hollywood actual, Weitz rodó la estupenda Un niño grande, aunque se la pegó con La brújula dorada, acabando en la saga Crepúsculo. Hoy se estrena la recuperación de American Pie, aunque no se ha contado con él. La cosa es venderla como la vuelta de los personajes encabezados por Jason Biggs pero ya treintañeros, con familias, trabajos, hipotecas y todo lo que certifica en nuestra sociedad que uno es un ciudadano integrado. Evidentemente la pulsión sexual de la adolescencia ya se ha calmado, pero hay otros retos y problemas que demuestran que igual el tiempo ha pasado por fuera, pero no por dentro de los personajes.

Así, American Pie: el reencuentro también se engancha a otra línea de la comedia generacional americana actual, como es el grupo de amigos que se vuelve a ver tras años separados y ven como la vida ha pasado por ellos, aunque en el fondo son los mismos adolescentes trasnochados, del tipo visto en Aquellas juergas universitarias. Aunque en la penumbra siempre estará el ochentero Reencuentro de Lawrence Kasdan que dio carta de naturaleza a estas reuniones. Como se ve, en el Hollywood actual no hay nada nuevo bajo el sol y las referencias cruzadas y descruzadas marcan su cine actual. En esta secuela que se estrena hoy veremos a nuestros personajes dispersos por la geografía estadounidense. Jim está casado y tiene un niño de dos años, Oz es periodista deportivo y tiene una supermodelo como novia, Kevin también se ha casado y es arquitecto, Stifler se dedica a las inversiones y Finch es un viajero impenitente del que nadie sabe exactamente donde está. Todos ellos vuelven a juntarse cuando en su localidad natal se monta una reunión de antiguos alumnos del instituto. Traen sus nuevos problemas, pero al reencontrarse con su pasado algunos de los viejos vuelven a activarse, en una nueva cadena de absurdos y malentendidos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios