Sin cambios. El recorrido que seguirán las hermandades por el interior de la Catedral será el mismo de los últimos años. El Cabildo Catedral ha decidido que el monumento al Santísimo se siga instalando en la Capilla Real, como en los dos últimos años, por lo que las cofradías seguirán pasando por delante de la patrona de la ciudad, la Virgen de los Reyes.

El Cabildo Catedral, tras la buena experiencia de los últimos años, y pese a estar libre de andamos y estar el Altar Mayor totalmente disponible para las celebraciones religiosas, ha preferido que el monumento se mantenga en la Capilla Real, un lugar que consideran muy apropiado y más propicio para la oración. La Capilla Real, además, cuenta con un acceso directo desde la Puerta de Campanillas para el público. Otro motivo esgrimido por el Cabildo es que el público que ve los desfiles procesiones por el interior de la Catedral se puede situar de manera más cómoda en la zona de la Puerta del Príncipe que, además, es el principal acceso. El número de sillas que se pueden instalar ahí es también mayor. El tercer motivo es que manteniendo el Santísimo en la Capilla Real las celebraciones religiosas de la Semana Santa, la Misa Crismal y los oficios de Jueves y Viernes Santo, se pueden hacer en el Altar del Jubileo, cuya capacidad y visibilidad es mucho mayor que el Altar Mayor. Según marca la liturgia, las celebraciones no se pueden realizar en el mismo altar en el que se exponga el Santísimo.