Brasil, con un jugador menos desde el minuto 48 y un gol de Lucas Paquetá, que anotó nada más saltar al césped en el 46, se impuso a Chile por 1-0 y avanzó a semifinales de la Copa América, en las que se medirá con Perú.

La selección brasileña, favorita al título de la Copa América, que juega nuevamente en casa y que goleó por 4-0 a la peruana en la fase de grupos, buscará su final el lunes, nuevamente en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro.

Pese a la expulsión del delantero Gabriel Jesús a los tres minutos del segundo tiempo, Brasil fue el vencedor del duelo de cuartos de final entre los campeones de las tres últimas ediciones de la Copa América (Chile en 2015 y 2016 y Brasil en 2019) gracias a que no perdió el orden ni la peligrosidad con diez jugadores y a que Neymar volvió a ser el jugador diferencial del partido.

Si el seleccionador chileno, el uruguayo Martín Lasarte, sorprendió al alinear desde un comienzo al atacante Alexis Sánchez, que sólo se unió al grupo esta semana tras superar una lesión, el brasileño, Tite, lo hizo al alinear a cuatro atacantes: Neymar, Roberto Firmino, Gabriel Jesús y Richarlison.

La Roja tomó la iniciativa desde el primer minuto y se lanzó al ataque para intentar sorprender temprano a Brasil. Con Brasil con dificultades para salir con el balón, los chilenos asumieron el control del partido en los primeros minutos

Brasil sólo comenzó a reaccionar a los 20 minutos con jugadas armadas por Neymar en el centro y explotadas en las puntas por Roberto Firmino y Richarlison.

Neymar desperdició la oportunidad más clara de Brasil a los 36 minutos tras enredarse en el momento de finalizar.

Para el segundo tiempo, Tite desistió de su opción por cuatro delanteros y mandó a la cancha al creativo Lucas Paquetá en lugar de Firmino. El cambio rindió frutos en el primer minuto, ya que Paquetá abrió el marcador tras un intercambio de pases cortos con Neymar dentro del área chilena.

Pero Brasil sufrió un duro revés un minuto después con la justa expulsión de Gabriel Jesús por una patada voladora en la cara de Mena. Chile aprovechó la superioridad numérica, se lanzó al ataque y hasta tuvo un gol de Vargas anulado por fuera de juego. Bravo respondió ante Neymar, y Brereton casi logra el empate al estrellar un balón en el travesaño brasileño.

En los últimos minutos los locales prefirieron administrar su ventaja y comenzaron a dejar pasar el tiempo con toques hacia atrás, cambios de jugadores y demoras en el inicio de las jugadas. Y Chile arrinconó a Brasil, pero se quedó sin tiempo para igualar.